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COREA DEL NORTE

Corea del Norte abandona el Tratado de No Proliferación Nuclear

Por Carmen Rosa FernándezTiempo de lectura1 min
Internacional12-01-2003

La crisis con Corea del Norte ha tomado un nuevo rumbo desde su anuncio de abandonar el Tratado de No Proliferación Nuclear (TNP). Esta decisión se une a los numerosos desafíos que el dictador norcoreano, Kim Jong II, ha lanzado al Gobierno de Bush y a la ONU desde que el pasado mes de octubre admitiera que está llevando a cabo un plan nuclear secreto.

Unas actividades que, sin duda, violan por completo el acuerdo firmado en 1994 con Estados Unidos según el cual Corea del Norte abandonaba sus programas nucleares a cambio de petróleo para el país. A partir de ese momento, el líder norcoreano ordenó la semana pasada una serie de medidas desde Pyongyang, la capital del país, como respuesta a la supuesta presión de Estados Unidos; los inspectores de la ONU enviados a Corea fueron expulsados del país y cuatro plantas productoras de plutonio se reactivaron para comenzar a producir armamento en un plazo de seis meses. Por su parte, Estados Unidos, ha insistido desde el principio en la diplomacia como herramienta para salir de la crisis y niega cualquier plan de represalia bélica contra el gobierno de Kim Jong II. No obstante, la ruptura del pacto de 1994 ha supuesto el corte de suministro energético para Corea del Norte, una de las naciones más pobres del planeta. La nueva decisión de Kim Jong de abandonar el TNP ha supuesto una sorpresa general, al convertirse Corea del Norte en el primer país en retirarse del acuerdo desde su establecimiento en 1968. En opinión de los diplomáticos, se trata de un "chantaje nuclear" que no busca sino restablecer la ayuda internacional y firmar un pacto de no-agresión con Estados Unidos. El Gobierno de Pyongyang ha amenazado incluso con una "Tercera Guerra Mundial" en el caso de que Estados Unidos o la ONU tomen represalias. Mientras tanto, la diplomacia tiene 90 días para tomar una decisión antes de que el abandono del tratado entre en vigor. Por el momento, el presidente surcoreano Roh Moo Hyun tiene previsto reunirse con Kim Jong II el próximo 21 de enero para intentar que reconsidere su decisión.