Esta web contiene cookies. Al navegar acepta su uso conforme a la legislación vigente Más Información
Sorry, your browser does not support inline SVG

FIN LEGISLATURA

Cuatro años marcados por la corrupción y el desafío soberanista en Cataluña

Por Selene PisabarroTiempo de lectura2 min
España24-10-2015

Rajoy apura sus dos últimos meses de la legislatura a saltos entre la corrupción que vive su partido y el conflicto con Cataluña. Durante cuatro años han salido a la luz grandes tramas como la Gürtel, Púnica o el caso Rato. Por otra parte, el nulo diálogo entre el Ejecutivo y el Govern ha puesto en la cuerda floja la relación con Cataluña, donde los independentistas advierten de que no cesarán en su empeño por conseguir la soberanía.

Rajoy inauguró este viernes la Oficina de Recuperación y Gestión de Activos (ORGA), junto al ministro de Justicia, Rafael Catalá. Según el presidente, evitará que “ningún delincuente disfrute de lo que haya robado. Esta oficina centralizará la gestión y, en vez de organizarlo cada juzgado competente, lo aunará y disminuirá los costes derivados del proceso mientras estén en la Administración de Justicia.

Los beneficios que se originen de la ORGA se destinarán a fines de sociales como a ONG dedicadas a la asistencia a víctimas y a las comunidades autónomas para que administren la ayuda.

Precisamente, esta es una de las bazas de Rajoy –además de la reforma del Código Penal- para luchar contra la corrupción, que ha teñido de negro toda la legislatura. Primero, el ex tesorero del PP, Luis Bárcenas, sacudió a la cúpula del partido cuando se reveló la documentación de la contabilidad en B y los sobresueldos que recibían los altos cargos. La sombra de Bárcenas ha planeado durante estos años sobre Génova, donde también se señala que la reforma de la sede está financiada ilegalmente, por ejemplo.

Le siguen la trama Púnica que se destapó este año sobre la corrupción en diferentes comunidades como Castilla y León, Murcia o Madrid; la Gürtel en la Comunidad Valenciana; o el caso Rato, en el que el ex ministro de Economía y ex vicepresidente del Gobierno durante el mandato de Aznar está imputado por fraude, blanqueo de capitales y corrupción de capitales.

La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, advierte que se ha tratado de poner coto a la corrupción, al mismo tiempo que regenerar la democracia, pero que “ha tocado dar muchas explicaciones por casos de corrupción que no eran de esta legislatura ni tampoco de la anterior, pero que por primera vez se han investigado y perseguido en esta legislatura”. Así, insiste en que la Justicia es imparcial y que no responde a los deseos de ningún Gobierno, tal y como ha criticado la oposición durante este tiempo por favorecer, en su mayoría, a los miembros del PP que han sido imputados.

Otro de los puntos de inflexión durante estos cuatro años ha sido la tensión entre el Ejecutivo y el Govern de la Generalitat de Cataluña. Las exigencias de Artur Mas a proclamar la independencia han conducido a que en 2014 se celebrase un referéndum a favor o en contra de la independencia que en febrero el Tribunal Constitucional declaró nulo.

Se trata de un tira y afloja entre ambos líderes en el que uno exige y otro no cede, sin llegar a acercar posturas. Además, el president convocó elecciones anticipadas el pasado 27 de septiembre y que, para los partidos independentistas tuvo el carácter de plebiscito. Actualmente, Mas es el president en funciones a la espera de que se establezca un pacto de Gobierno o de investidura.