TERRORISMO

La Guardia Civil desmantela un bosque abertzale

Por Fernando García1 min

España03-06-2014

Enaltecimiento del terrorismo por plantar 239 robles. Esta noticia, que podría no ser tomada con mucha seriedad, ha sido la causa por la que la Guardia Civil ha detenido a cuatro personas en la localidad guipuzcoana de Oiartzun, y es considerada la mayor muestra de este delito desde que el colectivo vasco anunciará el alto el fuego unilateral. Los cuatro arrestados, entre los que se encuentran un ex miembro de ETA que cumplió condena, habían plantado un denominado bosque de los gudaris, en el cual cada árbol plantado era acompañado con un número, que representaba un fallecido perteneciente a la banda terrorista vasca.

Los cuatro detenidos en la operación con nombre en clave Roble son Joaquín Izaguirre Elizondo, Francisco Javier Iragorri Gamio, Francisco Ramón Gaztelumendi Uribarren y Erramun Sagarzazu Gaztelumendi, quien cumplió condena de diez años en Francia por su pertenencia a ETA y posteriormente fue expulsado del grupo terrorista. Todos han pasado a disposición del juez de la Audiencia Nacional Pablo Ruz. El lugar elegido por los simpatizantes de la organización Etxerat, afín a ETA, no es otro que el simbólico monte Aritxulegi de Oiartzun, Guipúzcoa, que fue el sitio elegido para la oficialización de la ruptura de la tregua de 2006, durante el día dedicado por la banda terrorista al soldado vasco, o gudari eguna El pasado 9 de mayo (día señalado para el gudari eguna), los cuatro arrestados procedieron a plantar dos nuevos árboles en una ceremonia simbólica, por los etarras Francisco Javier López Peña, alias Thierry, quien fuera dirigente de ETA, y Arkaitz Bellón, muertos en 2013. En este acto, se izó una ikurriña y los asistentes portaban listas donde se referenciaban los nombres que correspondían a los números situados a los pies de los árboles plantados, todos miembros fallecidos de la banda terrorista. Las fuerzas del Estado han desmantelado el vallado de la zona y retirado los 239 robles que procederán a trasplantar a una nueva ubicación distante, así como la retirada de las placas conmemorativas. Durante este martes, helicópteros de la Guardia Civil han seguido con patrullas en el monte. La detención coincide con noticias que afirman que la banda terrorista planearía un nuevo simulacro de entrega de armas ante los mediadores internacionales, que podrían incluir el sellado de zulos y gestos más inspeccionables, como reclamaban las organizaciones verificadoras.