ETA

ETA entrega cuatro armas de fuego y 16 kilos de explosivos

Por Adriana Robledo3 min

España23-02-2014

ETA escenificó el pasado 21 de febrero un paso más para su desaparición. La banda terrorista protagonizó junto a la Comisión Internacional de Verificación (CIV) un vídeo en el que se mostraban las armas y explosivos que han dejado “fuera de uso”. El inventario de armas apenas llega al folio y medio y consta de cuatro armas de fuego y 16,5 kilos de material para fabricar explosivos. Los partidos nacionalistas y el Gobierno vasco han considerado el acto como “insuficiente” en comparación con todo el daño que ha causado ETA.

El encuentro entre los verificadores y los representantes políticos, entre los que estaban PNV, PSE y EH Bildu, los sindicatos ELA, LAB, CC OO y UGT, la patronal e Iglesia vasca, representada por el Obispado de Bilbao, Ángel Mari, duró 75 minutos y consolidó la unilateralidad de ETA para terminar con la violencia. El portavoz de los verificadores, Ram Manikkalingam, leyó en inglés y castellano un comunicado en el que explicaba estaa iniciativa de ETA. Aun así, se espera que ETA aporte más detalles sobre su modo de actuación en la que explicaría los nuevos datos y cómo afrontar la certificación de nuevos desarmes parciales. Los dos miembros de la Comisión Internacional de Verificadores (CIV), Ram Manikkalingham y Ronnie Kasrils, declararon en la Audiencia Nacional que los etarras se quedaron con las armas, pero que estaban “selladas y fuera de uso operativo; es decir, inutilizadas”. Asimismo, los verificadores declararon el pasado viernes que no iban a seguir con esta labor porque no les compete. “Tiene que aparecer una institución, un gobierno, que certifique la nueva entrega de armas”, declaró Manikkalingam. Con anterioridad, se habían negado a validar un vídeo aportado por ETA como primer gesto de desarme al no haberlo certificado. Por otro lado, comentaron a los sindicalistas y políticos la “odisea” a la que se enfrentaron al “acompañar” durante el pasado mes de enero a dos miembros de la banda terrorista a la localidad, que no especificaron, donde se encontraba el zulo con el armamento. “Nos exponíamos a ser detenidos porque íbamos con personas en situación ilegal”. La ausencia de los verificadores internacionales en los próximos pasos de ETA podría considerarse como una estratagema de la banda para comprometer a instituciones en un escenario donde sus reivindicaciones tengan más peso con respecto a sus presos. Por ello, la Comisión Internacional de Verificación, se apresuró a decir que tanto el Gobierno español como el francés “saben lo que es necesario para avanzar en el tema”. En esta petición hicieron referencia a que “no haya más detenciones”. Además, ellos mismos están convencidos de que ETA entregará las armas que aún posee, pero desconocen de la cantidad de la que se trata. ETA mandó el vídeo a la cadena BBC con el fin de darle más dimensión a su nuevo anuncio en la que se veía a dos encapuchados entregando armas y munición a los verificadores Manikkalingham y Ronnie Kasrils. En la sala donde se rodó, aparecía una copia del Guernica de Picasso y el anagrama de la banda. El contenido del vídeo reflejaba la “satisfacción” del presidente del Sinn Félin, Gerry Adams, junto con su confianza en “una respuesta positiva” por parte del Gobierno español, deseo compartido también por los verificadores y nacionalistas. Tras conocer el contenido del vídeo, el colectivo Covite presentó una denuncia ante la Audiencia Nacional en la que pidió que los verificadores declaren en calidad de testigo para conocer la identidad de los etarras. Por este motivo, el juez Ismael Moreno interrogó, en calidad de testigos, a tres de los seis miembros de la CIV para intentar localizar a los miembros de ETA que aparecen en el vídeo.