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BALONMANO

La actitud premió al Atlético de Madrid en la Copa del Rey

Por Roberto J. MadrigalTiempo de lectura2 min
Deportes03-05-2013

El Barcelona, con el campeonato de liga en la mano y clasificado para las semifinales de la Liga de Campeones, se tomó la Copa sin la tensión de su rival, muy motivado, y pagó la relajación con que afrontó el enésimo partido de la temporada contra el Atlético de Madrid. El conjunto de Talant Dujshebaev se puso las pilas desde el primer minuto y logró contener la reacción azulgrana en la segunda mitad para tomarse la revancha de su verdugo en los otros tres títulos de la temporada: la Supercopa, la Copa Asobal y la propia liga.

Barcelona 28 – Atlético de Madrid 31 Talant Dujshebaev ganó la partida claramente hasta el descanso. El Atlético se empapó del carácter de su entrenador y exhibió una defensa extraordinaria, que logró secar al Barça. Los azulgranas, que ya sufrieron en la ida de las semifinales de la Liga de Campeones, no impusieron su teórica superioridad. El danés Jesper Noddesbo, con dos goles, acercó a su equipo mediada la primera parte, pero cuando estuvo a un gol de diferencia (6-7), los blocajes defensivos y la espesura del ataque culé facilitaron la escapada rojiblanca, con un parcial de 2-7 liderado por Julen Aguinagalde y Joan Canellas -cuatro y tres goles respectivamente-, que llevó la ventaja a seis goles al paso por vestuarios (8-14). El Barcelona despertó en la segunda mitad y circuló la pelota con más velocidad. Los extremos -Víctor Tomás anotó ocho goles, siete tras el descanso- y las oleadas de los laterales -Dani Sarmiento, Eduardo Gurbindo y Siarhei Rutenka se repartieron diez tantos- permitieron al equipo de Xavi Pascual acortar la desventaja. No obstante, los destellos del croata Ivano Balic y un Aguinagalde imperial mantuvieron vivo al Atlético. Con todo, los madrileños se toparon con un Arpad Sterbik que sujetó a los catalanes cada vez que no encontraban la portería contraria, en un bonito mano a mano con su ex compañero José Javier Hombrados. Las buenas hechuras del Atlético le hicieron resistir el pulso y recuperar una renta de cinco goles, con un buen trabajo del macedonio Kyril Lazarov, autor de seis tantos, que apoyó la brega de Aguinagalde y Cañellas. Pero el Barcelona empujó en los últimos minutos, con un Noddesbo que engordó sus números. El conjunto madrileño lo dio todo y terminó exhausto, ya que terminó con tan solo cuatro jugadores de campo por las exclusiones de Mariusz Jurkiewicz y Balicaprovechó para mantener apretado el marcador. La Copa puso a prueba su nuevo formato, con eliminatorias previas de octavos de final -a partido único- y de cuartos de final -a doble partido-, de modo que participan todos los equipos de la liga, y no solo los ocho mejores al término de la primera vuelta. El Barça habia derrotado primero al Anaitasuna navarro y después al Balonmano Aragón, mientra que el Atlético de Madrid se clasificó tras imponerse en cuartos al Octavio vigués, y en los dos partidos de octavos de final al Granollers.