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Halloween

Mueren tres chicas en una fiesta en Madrid

Por Irene HernándezTiempo de lectura1 min
Sociedad01-11-2012

Una avalancha producida después del lanzamiento de una bengala parece ser el causante de que tres jóvenes fallecieran y dos se encuentren en estado crítico en una fiesta celebrada durante la noche de Halloween. La Policía se encuentra investigando en el Madrid Arena con el objetivo de clarificar las causas del suceso.

Tras recibir una llamada de alerta sobre las cuatro de la madrugada, unos 50 efectivos de los servicios de emergencia de la Comunidad de Madrid han acudido al lugar. Allí se encontraron con cinco paradas cardiorrespiratorias por aplastamiento a jóvenes de entre 18 y 25 años. Según Emergencias, a tres de las chicas se las atendió en el propio recinto, donde se certificó la muerte de dos de ellas tras intentar reanimarlas. Otra de las chicas fue trasladada en ambulancia al hospital Clínico, donde falleció al llegar. Las otras dos se encuentran en estado crítico en el hospital 12 de Octubre y la Fundación Jiménez Díaz. La Policía investiga las causas La Policía Nacional ha explicado que sobre las cuatro y media de la madrugada comenzaron “a recibir llamadas al 091 desde el interior del recinto en las que se comunicaba que se había producido una avalancha". Los agentes llegaron al recinto y comprobaron que efectivamente se había producido una oleada de gente iniciada al parecer después de que alguien lanzara una bengala. La Policía sigue investigando las posibles causas del suceso ocurrido durante la fiesta que ha concluido sobre las seis y media de la madrugada. Algunos testigos aseguran que "había un tapón humano en la única salida, porque todas las demás estaban taponadas, precintadas". "Había gente llorando, aplastada, personas de seguridad tirando de los que estaban atrapados", relatan. Aunque otros aseguran que "arriba, los accesos eran buenos, las puertas estaban abiertas, al menos había 10". Los investigadores centran ahora sus estudios en determinar el aforo, si era excesivo, si el reciento contaba con las salidas principales de emergencia, abiertas y señalizadas y si las medidas de seguridad eran las suficientes.