INDEPENDENCIA CATALUÑA

Artur Mas promete el paraíso con la separación

Por Selene Pisabarro2 min

España31-10-2012

Artur Mas, presidente de la Generalitat y líder de Convergencia i Unió (CiU) presentó el pasado domingo su programa electoral. Sus 150 páginas no quedan exentas de polémica. Aunque no hablan de independencia en ningún momento, pretenden dotar a Cataluña de un Estado propio en el marco de la UE. Por tanto, plantean una consulta para que los catalanes puedan decidir el futuro de su comunidad.

No es casualidad que la propuesta, “Catalunya 2020”, se llame igual que la estrategia de la UE (“Europa 2020), ya que busca aumentar el empleo, la productividad y la cohesión social. En ella, se establecen 105 medidas que llevarán a cabo en el caso de que CiU gane los comicios. Versa sobre las nuevas estructuras de Estado, abreviadas con las siglas EE. Entre ellas, figura aprobar una ley electoral, afianzar una hacienda propia catalana o crear un marco de relaciones laborales. El actual presidente de Cataluña pretende, con el tiempo, llegar a la moderación fiscal, que no se conseguirá si Cataluña no genera recursos que permanezcan en su territorio. Dice que no se atreve a bajar los tipos del IRPF (los más altos de la UE) porque hay que recortar por todos los sitios. También, promete la casi eliminación del impuesto de sucesiones aunque ahora mismo su Gobierno no puede ir más allá en asuntos de fiscalidad. Asimismo, su objetivo es reducir el número de trámites en la Administración local, dotar a la policía autónoma catalana de competencias en puertos y aeropuertos o gestionar todas las aguas interiores e infraestructuras básicas. En dos años, las empresas públicas de Cataluña han disminuido entre un 15 y un 25% del total, así que tratará de reordenarlas en el mapa. Aunque los nacionalistas han puesto en marcha los Mossos d’Esquadra o el Servicio Catalán de Tráfico, para ellos, Cataluña aún no cuenta con las estructuras de un Estado normal, por lo que se deben seguir construyendo, ya que no es un proceso rápido. Sus próximas metas son la política exterior, laboral, de seguridad, energética y educativa. Señala que durante toda la etapa se muestran abiertos al diálogo con las instituciones del Estado español y con la UE. Afirma que si Cataluña lograse la secesión, dispondría de muchos más recursos de los que tiene ahora procedentes del Estado. Se podría crear una estructura jurídica más ágil y moderna que permitiría dejar atrás las leyes más obsoletas. Además, se plantearía un incremento del sistema de pensiones ya que tendría un superávit en el sistema de la seguridad social. El líder de CiU ha proclamado que si se consigue, podrían reducirse los impuestos y aumentar los esfuerzos en la lucha contra el fraude. Para él, un Estado catalán sería “interdependiente” y con “fuertes vínculos” con España y el resto de la UE.