Esta web contiene cookies. Al navegar acepta su uso conforme a la legislación vigente Más Información
Sorry, your browser does not support inline SVG

TERRORISMO

EE.UU solicita pena de muerte para cinco autores del 11-S

Por Raquel GonzálezTiempo de lectura2 min
Internacional05-04-2012

Estados Unidos presentó el pasado miércoles cargos, por vía militar, contra cinco sospechosos de planificar y ejecutar los atentados del 11-S en Nueva York y en Washington en 2001. Compadecerán por primera vez, en un mes, ante el tribunal de crímenes en Guantánamo, donde permanecen detenidos. La pena máxima a la que les podrán condenar será la de muerte, según informó el Pentágono.

En total, 2.976 personas murieron en el atentado terrorista 11-S en 2001, en el que, presuntamente, Mohamed, Walid Muhamad Salih Attash Mubarak bin Attash, Ramzi Binalshibh, Ali Abdul Aziz Ali y Mustafa Ahmed Adam al Hawsawi fueron los responsables de la planificación y realización de dicho homicidio, tal y como informó el Departamento de Defensa estadounidense. Además, la fiscalía militar considera que estos detenidos actuaron conjuntamente con Osama bin Laden, entonces líder de Al Qaeda, en el secuestro de los cuatro aviones que se estrellaron contra las Torres Gemelas (Manhattan), contra el Pentágono (Virginia) y en un campo en Pensilvania. Se les imputan cargos por terrorismo, secuestro de aeronaves, conspiración, asesinato en violación de la ley de la guerra, ataques contra civiles, ataques contra bienes civiles, causar intencionalmente daños físicos graves y la destrucción de la propiedad en violación de la ley de la guerra. "Si resultan culpables, los cinco acusados podrían ser sentenciados a muerte", manifestó el Departamento de Defensa en un comunicado este miércoles. También constataba se les juzgará de forma conjunta y que la primera comparecencia, que abrirá un largo proceso judicial, se producirá dentro de 30 días, ante un juez militar en la base naval de la Bahía Guantánamo, en Cuba, enfrentándose a una pena capital, condena no aplicada desde 1961. “El presidente sigue con el empeño de asegurarse de que aquellos que perpetraron los ataques contra EE UU rindan cuentas ante la justicia”, dijo el portavoz de la Casa Blanca, Jay Carney, este miércoles en una conferencia de prensa. Cuando llegó Obama a Casa Blanca, en 2009, inició las gestiones para enjuiciar a los sospechosos de terrorismo arrestados en Guantánamo en tribunales civiles. A acusados relacionados con el 11-S propuso juzgarles cerca de donde se derrocaron las Torres Gemelas. Esto desencadenó una gran polémica en la ciudad de Nueva York. Los republicanos decidieron denegar los fondos al Departamento de Justicia para transportar a los detenidos a suelo nacional norteamericano.