GUERRA EN LIBIA
Gadafi desafía a los aliados y prevé “una guerra larga”
Por Sara Pérez Hernández4 min
Internacional20-03-2011
El líder de Libia, Muamar Gadafi, sigue con sus ofensivas declaraciones, tras el falso alto al fuego que anunció el vicepresidente libio. Gadafi advierte que Libia está preparada para una larga guerra y refiriéndose a la intervención extranjera, dice: “Os vamos a matar si nos invadís”. Mientras tanto, Trípoli se despertó el domingo en calma y sigue haciendo recuento de las bajas y de los daños producidos por los ataques.
Muamar el Gadafi advirtió el pasado jueves por la noche, con duras palabras: "Estás son las últimas horas de esta tragedia, llegaremos esta noche y no tendremos compasión". Los rebeldes anunciaron que no se rendirían. Pero Gadafi fue aún más lejos y comparó en su discurso la entrada de Franco en Madrid durante la guerra civil española con la que él pretendía llevar a cabo esa noche en Bengasi. El viceministro de Exteriores, Jaled Keem, abría la puerta a un posible alto al fuego de acuerdo con la resolución aprobada por el Consejo de Seguridad de la ONU, pero pocas horas después de decretar un alto el fuego unilateral, las fuerzas de Gadafi, atacaron Bengasi por tierra y mar y causaron “decenas de muertos y cientos de heridos”, según fuentes médicas de unos hospitales. Gadafi aseguró que la resolución de las Naciones de Unidas que avala una intervención militar en Libia "no tiene justificación alguna" y la calificó de "colonialismo flagrante". El dictador realizó estas declaraciones, recogidas por la cadena Al Jazeera, en la noche del viernes al sábado, tras la reacción oficial de su Gobierno, en la voz de su ministro de Exteriores. "Hay que crear una zona de seguridad aérea o marítima, según el caso. En 2011 nos está colonizando, nos están masacrando, nos imponen una zona de exclusión aérea después de una ataque militar tras otro. ¿Qué es racismo? ¿Qué es odio?", concluye Gadafi. Al llegar los aviones franceses a Bengasi, Trípoli se llenó de banderas verdes. Miles de partidarios del régimen tomaron por la noche las calles de la capital y se concentraron junto a las zonas militares para convertirse en escudos humanos y tratar de impedir el ataque de las fuerzas extranjeras. "¡Alá, Muamar, Libia ubes! (Dios, Gadafi, Libia y nada más)", gritaron los jóvenes pro-Gadafi en Bab el Azizia, el cuartel general y residencia del coronel Gadafi. Hubo disparos al aire, bocinazos de coches, cohetes, derrapes y atascos kilométricos que colapsaron los accesos a la vieja ciudad de Trípoli. El dictador respondió a sus partidarios con un mensaje telefónico en la televisión Libia: "Es necesario abrir ahora los arsenales y dar a las masas todo tipo de armas para que defiendan la independencia, unidad y honor de Libia". Gadafi llamó a los ciudadanos de las naciones islámicas y árabes, de Latinoamérica, Asia y África a apoyar a los "heroicos libios en su lucha contra la agresión". Mensajes contradictorios En una carrera a la desesperada para evitar el inminente bombardeo de las tropas extranjeras, el régimen del coronel Gadafi lanzó varios mensajes contradictorios. Primero atacó Bengasi por tierra y aire. Luego negó los hechos e insistió en que estaba cumpliendo el alto el fuego prometido el día antes. Luego dijo que todo había sido un teatro montado por los disidentes. Gadafi se emplea a fondo en dos de las ciudades al este de Trípoli que aún resisten su avance, Ajdabiya y Misrata. La primera, aunque rodeada por los tanques y la artillería pesada, sigue todavía en manos rebeldes. Si las fuerzas leales al coronel toman la ciudad, tendrán el paso libre hasta Tobruk y podrán rodear Bengasi, consagrada como capital de la revolución. Asimismo, el líder libio ha lanzado un mensaje a las fuerzas aliadas que están participando en los ataque para proteger al pueblo: "Ésta es nuestra tierra y vamos a defender nuestro honor". "Estamos preparados para una larga guerra, estáis advertidos". "Vosotros sois los invasores y sabéis que vamos a ganar en Bengasi y en toda Libia Gadafi", ha afirmado. "Vosotros podéis volver a vuestros países, pero nosotros no, ¡estamos en nuestra tierra!", ha añadido el líder libio."Os vamos a matar si nos invadís". Gadafi sigue insistiendo en que luchará contra la intervención extranjera. Por otro lado, los contrarios al régimen, difíciles de ver en las calles de la capital y mucho más apagados en los últimos días que sus compatriotas pro-Gadafi, interpretaron las palabras del ministro como un síntoma de la debilidad del régimen tras el anuncio de los ataques aéreos y navales. También eso fue lo que entendieron algunos afines al régimen. Gente que estos días expresaba su lealtad al líder dándose golpes en el pecho, manifestaba su preocupación por las declaraciones del ministro y requería información de los periodistas para averiguar la mejor manera de huir del país.