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UE

La polémica candidata a la Comisaría de Cooperación se retira de la política

Por Miguel MartorellTiempo de lectura2 min
Internacional19-01-2010

La presión sobre Rumiana Jeleva comenzó antes de la tensa audiencia que en el Parlamento Europeo la vio salir casi llorando. Las sospechas en torno a una empresa que no había declarado y en torno a su marido, a quien se acusa de mantener relaciones con la mafia rusa, han terminado por provocar su renuncia al cargo que le había ofrecido el presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso.

La audiencia parlamentaria tuvo lugar la semana pasada. Los diputados socialistas, verdes y liberales le hicieron pasar duros momentos a Rumiana Jeleva, propuesta por José Manuel Durao Barroso como comisaria de Cooperación de la nueva Comisión Europea. El exhaustivo examen al que la sometieron los miembros de la Comisión de Desarrollo provocó que abandonara la audiencia casi entre lágrimas y entre las críticas, cada vez más duras, de los eurodiputados de la izquierda europea. Las sospechas se centraban en una empresa propiedad de Jeleva que no había sido declarada por la eurodiputada búlgara. Pero a lo largo de la audiencia tuvo que salir en defensa de su marido, a quien la prensa de su país vincula con la mafia rusa. Las vagas respuestas que dio en la audiencia provocaron, además, que muchos eurodiputados de la izquierda europea la calificaran como poco idónea para el cargo de comisaria, teniendo en cuenta el desconocimiento que de su futuro puesto demostró. Aunque este martes estaba previsto que una comisión de la Eurocámara debatiera el futuro de la candidata búlgara, Jeleva decidió por la mañana renunciar al cargo. Es más, según el presidente de su partido, Joseph Daul, la eurodiputada ha decidido abandonar la actividad política. La retirada de Jeleva ha aumentado la tensión ya existente por este asunto entre el Partido Popular Europeo -donde la búlgara ejercía de vicepresidenta- y el resto de partidos políticos de la Eurocámara, a los que acusa de haber sido demasiado agresivos en la audiencia. Aunque Jeleva ya cuenta con una sustituta que deberá pasar un nuevo examen de la Comisión de Desarrollo -Kristalina Georgieva, vicepresidenta del Banco Mundial- es más que previsible que el PPE busque resarcirse en una de las candidatas del otro bando. De momento, la actual comisaria de Competencia, la holandesa Neelie Kroes, debe volver a enfrentarse a la audiencia de la Comisión de Desarrollo por segunda vez. Todo ello provocará que la nueva Comisión de Barroso no esté lista para ser sometida a votación la semana que viene, tal y como estaba previsto.