VIOLENCIA DE GÉNERO

Cuatro mujeres asesinadas por malos tratos una misma semana

Por Esteban del Pozo1 min

Sociedad29-03-2008

Cuatro asesinatos en menos de 24 horas: continúa el aumento de las muertes por ataque criminal a la pareja. Los 14 casos comprobados en lo que va de año y otros tres más que se están investigando corroboran la necesidad de solucionar este problema social. En estos dos meses, cada tres días, aproximadamente, una mujer ha sido asesinada por su pareja o ex pareja.

La entrada en vigor de la Ley Integral Contra la Violencia de Género fue esperanzadora. De 64 asesinatos en 2004 la cifra descendió a 52 al año siguiente. Pero, a partir de ese momento, la tendencia se invirtió, hasta el punto de que en 2007 se llegó hasta los 74 crímenes, la cifra más alta desde que se tienen estadísticas. Por esto, los políticos han introducido el tema como uno de los principales en cada uno de sus respectivos mítines. El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, anunció, en una entrevista en televisión, que, si gana las elecciones, convocará una reunión “urgente” y “monográfica” de la conferencia de presidentes autonómicos. Por su parte, el presidente del Partido Popular, Mariano Rajoy, aseguró que será “implacable y contundente” con la violencia de género, al tiempo que advirtió que no se combate esta lacra sólo con una ley, sino que se “necesitan juzgados, policías y medidas preventivas”. Los agresores son, en su mayoría, hombres posesivos que ejercen mucho control sobre la mujer. Si se es víctima de malos tratos, lo mejor que se puede hacer es ponerse en manos de profesionales mediante una consulta en el teléfono gratuito 900 19 10 10, y denunciar al maltratodor. Para prevenir la violencia sexista es necesario un cambio de los estereotipos y valores vigentes. Según un estudio de la Fundación Mujeres, el 23 por ciento de los chicos adolescentes entre 14 y 17 años conciben a la mujer como inferior y débil; el 35 por ciento se muestran de acuerdo o muy de acuerdo con actitudes que justifican, niegan o minimizan la violencia de género. El cambio de estos estereotipos supone un proyecto concreto de educación a largo plazo.