ALEMANIA
El partido de Merkel afronta una crisis
Por Carmen Benítez Herrero1 min
Internacional30-01-2008
En Hesse se obtuvieron resultados un tanto negativos para la Unión Demócrata Cristiana de Merkel bajo manos de Roland Koch, su aliado. Sin embargo, Christian Wulff, heredero de Merkel logró suficientes votos para mantenerse en el poder en Baja Sajonia. Aun así, el partido de la canciller Angela Merkel (CDU) sufrió graves reveses en las elecciones estatales y deja sin saber quién gobernará la región occidental.
Las elecciones han sido consideradas como una prueba de fuerza para la CDU (Unión Demócrata Cristiana) de Merkel y los socialdemócratas del Partido Social Demócrata (SPD) -ambos son socios en una gran coalición nacional- ante las elecciones generales de finales del año próximo. En el Estado de Hesse, la CDU de Merkel, bajo el gobernador Roland Koch, logró una pequeña mayoría -del 0,1 por ciento de los votos- pero obtuvo el mismo número de escaños que los socialdemócratas. Sin embargo, la candidata socialdemócrata Andrea Ypsilanti tiene más aceptación popular que Roland Koch, aunque este hecho, no cuente en las urnas. Ypsilanti es representante del ala izquierda del SPD y se la conoce por haberse opuesto al paquete de recortes al sistema de previsión social que el entonces canciller Gerhard Schröder dispuso bajo el nombre de Agenda 2010. Durante la campaña aprovechó el descontento que reina en Hesse sobre la política de educación de Koch y recogió firmas para implantar el salario mínimo. Además, anunció que forzará el uso de energías renovables. Mientras tanto, en Baja Sajonia, el representante de la CDU, Christian Wulff, obtuvo el 42 por ciento de los votos, suficiente para mantenerse en el poder con los liberales Demócratas Libres (FDP). Pero Koch y Wulff, que son vistos como herederos potenciales de Merkel como canciller y líder conservador, ya vieron reducirse su apoyo desde las últimas elecciones en sus estados de 2003. Los comicios marcan el inicio de un año electoral que se completará con elecciones en Hamburgo, en febrero, y en Baviera, en septiembre. De ellos se esperan señales para las estrategias de los partidos ante las elecciones generales en otoño de 2009.