PARO

La tasa de desempleo vuelve a subir en el cuarto trimestre

Por María García Cirac2 min

Economía26-01-2008

A pesar de la creación de nuevos puestos de trabajo durante el año 2007, el paro sigue creciendo. En el último trimestre la tasa de desempleo se situó en el 8,6 por ciento, según datos de la Encuesta de Población Activa (EPA).

En este año que acaba de concluir se crearon 475.100 nuevos puestos de trabajo. A pesar de ello, el número de parados aumentó en 117.000 personas, obteniendo como resultado un total de 1.927.600 personas desempleadas. Esto significa un aumento del 6,46 por ciento en relación al año 2006. El crecimiento de la economía española no logra reducir el paro, cuya tasa ha alcanzado el 8,6 por ciento o, lo que es lo mismo, la tasa más alta desde el primer trimestre del año 2006. Una de las causas principales es el frenazo que ha sufrido el sector de la construcción. Este hecho obliga a que el Gobierno y las empresas fomenten una mayor cualificación de los trabajadores pues, de lo contrario, se podría provocar un paro indefinido por parte de los colectivos que hasta ahora proporcionaban una mano de obra barata. Otra posible causa es la subida del precio del petróleo y de los alimentos que han propiciado aumentos significativos en el IPC, con el consiguiente incremento del ahorro por parte de los agentes económicos. Una probable solución sería una reducción de la presión fiscal por parte del Gobierno, que ayudaría a que los ciudadanos volvieran a consumir, evitando así un enfriamiento de la economía. También surtiría efecto una reducción de los tipos de interés, pero hay que recordar que la política monetaria está en manos del Banco Central Europeo (BCE). Es decir, hasta que no considere que esta situación afecta significativamente al conjunto de países que conforman la Unión Europea, no tomará medidas significativas. Por último, sería bueno recordar que, aunque estos datos son estimados (la EPA se lleva a cabo en unos 60.000 hogares y no en todo el conjunto de la población), sí que es cierto que los resultados se aproximan bastante a la realidad y que no son nada alentadores. Habría que reconocer la existencia de la crisis y a partir de ahí afrontarla.