FÚTBOL SALA

España revalida su ¬corona¬ europea

Por César Brito2 min

Deportes25-11-2007

La selección española de fútbol sala defendió con éxito su título de campeona de Europa. Los italianos se estrellaron con un equipo centrado y sin fisuras que ganó la final con comodidad por 3-1. Fue la guinda a un europeo que fue de menos a más en intensidad y que consolidó a España como la mejor selección del continente.

La final del campeonato de Europa de la UEFA de fútbol sala enfrentó, en Oporto, a Italia con España. Los de José Venancio venían de superar in extremis una apretada semifinal con los portugueses y se plantaron sobre el terreno de juego decididos a dominar desde el primer momento. Lo consiguieron sin problemas, a pesar del peligro de los italianos que, en cada uno de sus ataques se encontraban con un Luis Amado muy seguro bajo palos durante todo el partido. El primer gol de los españoles lo anotó Marcelo dos Reis mediada la primera mitad. A partir de ese momento, la campeona administró su ventaja y se mantuvo sólida atrás y atenta a los contraataques, que le valieron para ampliar su ventaja, gracias a sendos goles de Daniel Ibañes y Javi Rodríguez, al comienzo del segundo periodo. A Italia, ya a la desesperada, de nada le valió el tardío gol del portero italiano Alexander Feller. Semifinales El partido entre italianos y rusos parecía nivelado, pero un tempranero gol de Nando Grana, puso por delante a la escuadra azzurra. Los italianos se posicionaron bien en defensa y trataron de neutralizar las transiciones de sus contrarios, que no aprovecharon sus oportunidades y vieron pasar los minutos con impotencia. El definitivo 2-0, obra de Assad Fabiano, colocó a Italia en la final. España, en el otro enfrentamiento de semifinales, quería llevar el peso del partido, aunque los portugueses mostraron un espléndido planteamiento táctico y una presión asfixiante que neutralizó la superioridad técnica de los españoles. Gonçalo adelantó a los portugueses en la segunda mitad y Ricardinho pareció apuntillar a la bicampeona del mundo poco después. Pero España hizo valer su experiencia y calidad: remontó el resultado en seis minutos con goles de Daniel y Andreu Linares, colocó el empate a dos en el luminoso y forzó una ronda de penaltis que terminaría por auparla hasta la final. El guardameta Luis Amado, en estado de gracia, destrozó las aspiraciones de la anfitriona. Fase de grupos El desarrollo de la última etapa del campeonato no deparó demasiadas sorpresas. El grupo A lo integraban Portugal, Italia, República Checa y Rumania. Pasaron a semifinales los transalpinos y los lusos, que solventaron sus encuentros sin problemas y empataron sin goles en su enfrentamiento directo. Tampoco hubo sobresaltos en el grupo B. Además de España, estaban Rusia, Serbia y Ucrania. Los serbios dieron un toque de atención a los españoles empatando a uno. Pero la roja, que venía de endosarle seis tantos a Ucrania, necesitaba desquitarse ante Rusia. España ganó 4-1, se disiparon las dudas y pasó a semifinales, como primera de grupo, seguida por los rusos.