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DÍA DE LA SALUD

El mundo necesita cuatro millones de sanitarios

Fotografía
Por Lucía E. GonzálezTiempo de lectura2 min
Sociedad07-04-2006

Con motivo del Día Mundial de la Salud, que se celebra cada 7 de abril, la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha presentado en Lusaka (Zambia) su Informe sobre la Salud 2006. Este año, ante el creciente déficit de personal sanitario, el documento aboga por una nueva alianza mundial capaz de ofrecer todos los recursos humanos necesarios en la lucha contra las enfermedades.

Se calcula que casi sesenta millones de profesionales sanitarios trabajan para dar asistencia a los más de seis mil millones de personas que pueblan el planeta. Sin embargo, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), 57 países del mundo, entre ellos la mayor parte en Asia y en el África subsahariana, sufren escasez permanente de personal que, según la organización, es "producto de décadas de anemia inversora en la formación, remuneración, condiciones de trabajo y gestión de estos profesionales". Se calcula que harían falta unos cuatro millones de profesionales (la mayor parte de ellos en África), y esto dificulta la lucha contra el sida, la reducción de la mortalidad infantil, la mejora de la salud materna y varios objetivos más fijados por la comunidad internacional. La Joint Learning Initiative, una organización constituída por cerca de cien autoridades sanitarias, presentaba ya en 2004 las puntos clave de la situación de estos trabajadores, así como la necesidad de que África doblase el número de sus profesionales de la salud (de 1 a 2 millones), para alcanzar un nivel mínimo en sanidad. Dos años después, la OMS, ha decidido seguir las recomendaciones de esta iniciativa, que solicitó a las diferentes naciones y organizaciones internacionales que enunciaran, entre 2006 y 2015, la "Década de los Recursos Humanos para la Salud". La OMS ha establecido así unas metas para los próximos diez años, que comprometen a todos los países: ricos y pobres. El lema "colaboremos por la salud", será la bandera para la elaboración de planes estratégicos nacionales de personal sanitario, el aumento de la inversión en formación y una mejor gestión del conocimiento. Estos y otros serán los objetivos que deben ir alcanzándose durante esta década, en la lucha contra las principales amenazas para la salud de la humanidad.