INICIO DEL CURSO POLÍTICO

El PSOE ante el reto de las reformas estatutarias

Zapatero, durante su participación en la fiesta minera de Rodiezmo

Por Antonio Pérez Vicente3 min

España04-09-2005

Después de unas vacaciones sin apenas tiempo para descansar (la polémica suscitada por la Guardia Civil de Roquetas y el accidente de Afganistán donde murieron 17 soldados españoles mantuvieron ocupado al presidente durante su retiro estival), Rodríguez Zapatero afronta el inicio del curso político con numerosas citas programadas en su agenda.

En primer lugar, las reformas de los estatutos de algunas Comunidades Autónomas. A pesar de que la ley más avanzada es la de la Comunidad Valenciana, es el Estatuto catalán el que sigue levantando los mayores recelos tanto en las filas populares como en las socialistas. El compromiso del presidente de la Generalitat, Pascual Maragall, que aseguró que la reforma no superará el marco constitucional, tranquilizó a los barones más reticentes como Rafael Simancas o el Presidente de Extremadura, Juan Carlos Rodríguez Ibarra, que mostró su desconfianza. Con los ánimos más calmados, el Presidente del Gobierno pidió a los socialistas que no se dejaran arrastrar "ni por el inmovilismo ni por las aventuras egoístas e insolidarias" además de exigir "respeto" a sus compañeros. Otro de los retos, en este caso más inmediato, es la Conferencia de Presidentes autonómicos, prevista para el próximo día 10 y en el que la deuda en torno a la financiación sanitaria será el tema estrella. Pero antes el Presidente recibirá al líder de la oposición, Mariano Rajoy. De esta manera Zapatero cumplirá con su promesa de informar a Rajoy sobre sus proyectos en política de Estado. Desde el pasado 14 de enero, el presidente del PP no había vuelto a pisar el suelo de La Moncloa, en parte debido al distanciamiento que durante los últimos meses han protagonizado las dos formaciones. Se espera que el encuentro facilite la toma de posiciones y la planificación tanto del PP -que ha optado por variar su discurso- como del PSOE de cara al recién inaugurado curso político. Los asuntos que confrontan, principalmente, a los dos líderes son la reforma de los estatutos, las relaciones exteriores y la estrategia contra el terrorismo en el País Vasco. En este sentido, los socialistas confían en un proceso de normalización en Euskadi después de que ETA no haya atentado en los últimos 27 meses. Sin dar exageradas muestras de optimismo, el Ejecutivo espera que Batasuna vaya asumiendo el papel de la banda terrorista mientras mantiene que no pagará ningún precio político por el fin del terrorismo y exige la entrega de las armas antes de comenzar a negociar. Mientras tanto, los socialistas vascos se han negado a formar la mesa de diálogo propuesta por Ibarretxe con el partido ilegalizado mientras éste no condene el terrorismo. A pesar de la situación, desde el Gobierno central se busca un acercamiento a partidos como el PNV como posibles aliados hacia el ecuador de la legislatura. Al contar prácticamente con el respaldo del BNG tras el nuevo Gobierno de Galicia, el Ejecutivo podría tener un mayor margen de maniobra con respecto a ERC e IU pensando en la aprobación de los próximos Presupuestos Generales. Sin embargo La ronda de contactos anunciada por el secretario de Organización, José Blanco, no tendría al PP ni a CiU como interlocutores. La Alianza de Civilizaciones en marcha En el ámbito internacional Rodríguez Zapatero también tiene una apretada agenda. Casi está en marcha la Alianza de Civilizaciones que propuso y que ha sido asumida por el secretario general de la ONU, Koffi Annan. Las reuniones con expertos para hallar una solución al conflicto entre los países musulmanes y Occidente comenzarán a mediados de septiembre en Nueva York. Además, la Cumbre Iberoamericana que se celebrará el próximo octubre en Salamanca -que pretende estrechar lazos entre España y algunos países latinoamericanos- contará con la presencia de numerosos líderes políticos. Por último, otra de las citas será la Cumbre Mediterránea, en la que se espera una importante representación de personalidades de Estados Unidos para ayudar a algunos países mediterráneos en el camino hacia la democratización. Por otro lado, el Presidente defenderá ante la UE el relanzamiento de la Constitución además de tratar de mitigar la reducción de los fondos de cohesión para el próximo periodo 2007-2013, ya que la renta per cápita española -con la incorporación de los países del Este- casi alcanza la media europea.