FÓRMULA 1

McLaren, el más reforzado

Por Marta G. Calderón3 min

Deportes06-03-2005

La escudería del cavallino rampante, campeona del mundo las últimas cinco temporadas, tendrá que luchar por la supemacía del Mundial con las reforzadas BAR y Renault, y además con Williams y McLaren, que necesitan demostrar su potencial después de sus discretas actuaciones de la temporada pasada. Sobre todo el equipo de Ron Dennis, con la llegada del colombiano Juan Pablo Montoya y un monoplaza rapidísimo, puede convertirse en aspirante al título.

Ferrari y BAR, a mantenerse Ferrari, el único equipo que ha asegurado su continuidad en la competición hasta 2012 –otros equipos sopesan la creación de un campeonato paralelo, en vista de que Bernie Ecclestone no les asegura suficientes ingresos– no estrenará el nuevo monoplaza hasta el Gran Premio de España. La escudería mantiene a sus dos pilotos oficiales, el heptacampeón alemán Michael Schumacher y el brasileño Rubens Barrichello. Como mayor novedad resulta la llegada como piloto probador del español Marc Gené, que se une al italiano Luca Badoer. También BAR, revelación en 2004, mantiene al inglés Jenson Button –tras su frustrado fichaje por Williams– y el japonés Takuma Sato, en tanto que los probadores son el brasileño Enrique Bernoldi –piloto de Arrows en 2001 y 2002– y el británico Anthony Davidson. Renault y McLaren, la amenaza La escudería francesa Renault, tras los problemas en la evolución del bólido de la pasada temporada, mantiene al español Fernando Alonso como jefe de filas, pero incorpora al italiano Giancarlo Fisichella, en Sauber Petronas la temporada pasada. El piloto probador es el francés Frank Montagny. El equipo que dirige Flavio Briatore ha registrado excelentes tiempos en pretemporada, aunque es una referencia apenas orientativa. McLaren, tras la mejora de la última parte de la temporada pasada, promete mucho con un coche a priori rapidísimo. Sigue el finlandés Kimi Raikkönen y el escocés David Coulthard ha dejado su sitio a Montoya. El piloto probador de la sesión libre de los viernes será Pedro Martínez de la Rosa, que comparte tareas con el austriaco Alex Wurz. Nuevas caras en BMW y Toyota En BMW se han hecho profundos cambios: Ralf Schumacher y Juan Pablo Montoya han dejado paso al australiano Mark Webber –que ocupaba asiento en Jaguar– y por el alemán Nick Heidfeld, que tras pilotar en Jordan, le ganó la partida en la pretemporada al probador, el brasileño Antonio Pizzonia, por el segundo asiento oficial. El desarrollo del nuevo monoplaza no ha sido el esperado y ha habido diversos problemas. También Toyota estrena pilotos oficiales: el italiano Jarno Trulli –ex compañero de Alonso– y Ralf Schumacher. El brasileño Ricardo Zonta y el francés Olivier Panis –que por su veteranía, 37 años, optó por una semiretirada– serán los probadores con la intención de que la marca japonesa dé por fin el salto de calidad a los puestos de podio. Sauber y Red Bull, los ‘tapados’ La escudería suiza Sauber –que ha cambiado de proveedor de neumáticos a Michelin– ha fichado al canadiense Jacques Villeneuve, que finalizó la temporada en Renault, y el brasileño Felipe Massa continúa como segundo piloto. A su nivel, es decir, erigirse en alternativa a los equipos oficiales, se sitúa también el nuevo equipo Red Bull –con la estructura del antiguo Jaguar–, que confía en Coulthard y en el austriaco Christian Klein para salir adelante. No obstante, también puede disputar algunas carreras el probador, el italiano Vitantonio Liuzzi. Jordan y Minardi: los modestos Jordan, que ha sido comprado por el magnate ruso Alexander Schnaider con vistas a formar un nuevo equipo en 2006, cuenta esta temporada con los motores de Toyota y dos pilotos jóvenes que han aportado patrocinadores: el portugués Tiago Monteiro y el indio Narain Karthikeyan, ambos procedentes de las Series Mundiales de Nissan. Minardi, como siempre, luchará por sobrevivir en la parrilla con el alemán Christijan Albers y con el austriaco Patrick Friesacher. Por lo pronto, el equipo que dirige el australiano Paul Stoddart necesitará del permiso de todos los equipos para poder competir con los bólidos de la temporada pasada, que aún no están adaptados al nuevo reglamento, en las primeras carreras. Si no fuera así, los Minardi no podrían competir hasta que cumplan con las especificaciones de 2005.