ANÁLISIS DE ECONOMÍA

La luz, la patria y las prisas

Por Gema Diego1 min

Economía04-02-2007

La espantada a última hora de Gas Natural presenta un ligero tufo a chamusquina: la del que se sabe cerca de quemarse el trasero y del ridículo después de 17 meses aguantando el tipo. ¿Por qué, si no, tantas prisas? Es revelador que a la gasista le haya faltado tiempo para salir por pies justo cuando habían sido levantadas todas las suspensiones a su OPA. Así que, de la disyuntiva entre cobardía o prudencia, lo más acertado sería dar como solución la inmadurez. Gas Natural ha decidido trasladar la mofa a sus defensores –véase el Gobierno- para salir medianamente indemne de una atrevida operación cuya huella tardará meses, si no años, en borrarse. Mucho tiempo es para un mundo dominado por las prisas, algo de lo que no se salva ni E.ON que, ilusa, quiere tener zanjado el proceso a mediados de abril. Puestos a hacer apuestas, me juego un análisis de disculpa a que José María Cuevas no contempla desde la presidencia de la CEOE el luminoso triunfo de la germana. Se ve que la alemana no ha aprendido que todo lo que toca Endesa se torna imprevisible. Que es mejor no hacer cálculos porque lo único matemático es la revalorización continua de la eléctrica. Y que quien hoy te defiende mañana se alía con quien menos te lo imaginas: seguir con el rabillo del ojo la evolución de Acciona no estaría de más, pues cuando los sentimientos patrióticos pueden dar beneficios, éstos afloran de la nada.

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