Adelante... por la puerta de atrás

Por Javier Herrero1 min

Era el día. El día en el que el Real Madrid iba a jugar con su equipo de gala, considerado como uno de los mejores de todos los tiempos: Zidane, Figo, Raúl, Roberto Carlos, Ronaldo... futbolistas de ensueño, pero unos futbolistas que no pudieron vencer al Roma de Fabio Capello, quien regresaba al Santiago Bernabeú presentando un once totalmente desconocido, jugando con un media punta y dos delanteros. Durante la primera mitad, Totti se mostró como el mejor jugador del equipo de Capello; el propio futbolista italiano sería autor del tanto del equipo romano. Los jugadores del Madrid, por su parte, se mostraron bastante apagados. Pocas ocasiones crearon los dirigidos por Vicente del Bosque durante la primera parte, y siempre a través de acciones aisladas y sin mucha coherencia en ataque; el Madrid era un equipo muy espeso en ataque... carecía de ritmo y de claridad. Y durante la segunda parte, y para desgracia de la afición blanca, todo continuó igual. Además, los italianos fueron a lo suyo: con el marcador a favor, renunciaron prácticamente al fútbol de ataque. Batistuta sustituyó a Montella en el Roma, pero esa sustitución sirvió de poco, pues los italianos seguían con su conservadurismo durante esta segunda mitad. Por su parte, el entrenador salmantino del Madrid dio entrada a Morientes y a Solari por un flojo Ronaldo y el lesionado Zidane. Pero poco afectaron estos cambios a un Madrid totalmente desconocido, acomodado; más aún, sabiendo que es en casa donde el equipo blanco se mostraba más fuerte... pero ésta era la excepción que confirma la teoría de la crisis merengue. A pesar de que en los minutos finales, el Madrid acabó agobiando al Roma, en el que no jugó Guardiola, el marcador se quedó como estaba. Aun así, pese al tropiezo, los de Vicente del Bosque siguen adelante; por la puerta de atrás, pero el Ferrari del fútbol, al menos, pasa a la siguiente ronda.