Da igual

20-02-2013
Imprimir este artículoImprimir Enviar este artículoEnviar Comentar este artículoComentar

El debate sobre el estado de la nación es esa cosa que nuestra clase política celebra anualmente para dar lustro al Parlamento y que parece interesar únicamente a los periodistas.
En el veremos a un presidente que ha llevado al harakiri a los que escribieron su programa electoral buscar en sus apuntes algún dato económico para el optimismo.
Veremos también al líder del primer partido de la oposición llevarle la contraria por sistema y atizarle con ese caso de supuesta financiación ilegal que no termina por llevarse a nadie por delante.
Después, con suerte, si los medios lo permitimos, veremos qué dicen el resto de partidos, aunque lo que más nos interese sea la encuesta en torno al ganador, como si en la discusión sobre el estado de algo pudiera haber vencedores y vencidos.

Da igual, en cualquier caso, lo que suceda en el Congreso, esa institución tan blindada como nunca antes en la historia de la democracia para evitar que la calle se acerque demasiado.
Da igual porque no nos lo creemos.
El presidente no hallará solución al desastre de los últimos despidos, al goteo continuo de desahucios, a un Estado del bienestar en proceso de desmantelamiento, a la ausencia de un futuro en un país sin tejido industrial ni planes a largo plazo para el modelo productivo.
El líder de la oposición -si es que alguien lidera eso- no se reconocerá, públicamente, incapacitado para liderar absolutamente nada. Entre los partidos minoritarios -que injusto ha sido siempre ese calificativo de los medios- habrá alguno que tape descaradamente sus vergüenzas porque no puede ser ejemplo de nada y habrá alguno que otro que lance brindis al sol esperando que sea suyo el titular de la sección de política del día siguiente.

Con unos partidos políticos esforzándose cada día por aparecer más desacreditados a ojos de la ciudadanía, con una casta estupefacta ante las circunstancias y un país entero protestando por lo negro que pinta el mañana, da igual lo que hagan, porque ya no nos creemos nada.

Miguel Martorell

Colaborador de LaSemana.es desde 2003

Jefe de Sección en Europa Press

Autor del poemario Autócratas y de Memorias de un cualquiera

Twitter: @M_Martorell


MIS ÚLTIMOS POSTS:
  • Francisco y el lobby homosexual 12-06-2013
  • No hay respeto 20-03-2013
  • Da igual 20-02-2013
  • Cómplices en Calabria 06-02-2013
  • El arte absolverá 14-12-2012
    pinga02 728x90
    Síguenos en Facebook y Twitter
    © 1997-2024 AGD y LaSemana.es
    ¿Quiénes somos? | Contratar publicidad