El caso del candidato a senador propuesto por Bildu, Iñaki Goyoaga, es un ensayo a pequeña escala de lo que podría ser un proceso de ilegalización de Sortu/Bildu. Con los mismos protagonistas e ingredientes. Por un lado está UPyD, el partido que con más ahínco defiende actuar contra cualquier vestigio de las marcas batasunas en las instituciones. Por otro lado está el PP, que dice que "Bildu es ETA", pero a día de hoy no ha solicitado a la Abogacía del Estado ni a la Fiscalía que inicie un procedimiento de ilegalización. En público -pero sobre todo en privado- dicen que no hay pruebas suficientes y que perderían en los tribunales sirviéndole así al mundo de ETA una victoria gratuita. Por su parte, la izquierda abertzale busca afianzarse en la moqueta sin renunciar a nada y construyendo ese discurso de justificación de la violencia.
Goyoaga es un histórico abogado de etarras. Según Latasa Getaria, el asesino de Yoyes, (ahora arrepentido y fuera de la banda) era la persona que "movía los hilos" entre los presos en nombre de ETA. Está en libertad porque resultó absuelto de colaborar en un plan para sacar a un etarra de la prisión de Huelva en helicóptero. Pero su nombre aparece también en la extensa documentación de la Guardia Civil sobre la investigación al entramado de abogados de ETA. Según esos datos, Goyoaga, alias Dionisio, recibía instrucciones directamente de la cúpula etarra. Por estos motivos UPyD presentó una denuncia contra el abogado por integración en banda terrorista que la Fiscalía ha decidido atender.
Hay mucha documentación, pero sería bueno que estuviese lista y desencriptada antes de que acabe el mes, pues Goyoaga ya habrá sido nombrado senador y luego todo sería más difícil, pero no imposible. La mayor complicación será poder demostrar que Dionisio, como aparece en los papeles de ETA es Goyoaga. El resultado de esta intentona dará la razón a unos y otros sobre si merecía la pena intentarlo.
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