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La Semana que vivimos - Semana del 13 al 19 de abril de 1998 
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 El fin del libro es acercarse más al alma humana, conocerse mejor a sí mismo y a los demás. Por ello, el autor anima a sus lectores a ser intrépidos, a escuchar sus corazones, atreverse a manifestarse tal y como son, diciendo "no" a todo lo que les iguale y estandarice. Según afirma Ana María Matute en el prólogo de esta edición: "ahonda, de nuevo, en el corazón humano para conectar con nuestra sensibilidad más primitiva". Hay muchas reflexiones sobre el amor y la muerte, según señala Gala, "pues se trata de los grandes temas de siempre". "Este libro es una especie de antología de posibilidades y con el me he sentido muy libre. He podido saltar de un tema a otro como si fuera un niño pequeño. Ha sido una experiencia muy divertida". Ha elegido este título, "El Corazón tardío", porque según Gala "normalmente no ponemos toda la carne en el asador y perdemos muchas ocasiones de alcanzar el amor, de ser generosos con los demás" aunque asegura que la felicidad es "efímera y difícil de expresar en el momento en el que se está viviendo". La clave del éxito de este escultor es su capacidad para hablar al lector de "cosas que quiere escuchar, de reflexiones que todos nos hacemos en voz baja y necesitamos ver expresados de algún modo". Giacomo Leopardi (1798-1837) es el único gran poeta del romanticismo italiano, y uno de los grandes románticos europeos. Melancólico, triste, desdichado, desafortunado en físico y amores, Leopardi escribió una poesía sobre la desolación de la vida y la vana esperanza que engaña en la juventud, absolutamente espléndida. Eloy Sánchez Rosillo que se declara leopardino fundamental, escoge los 20 poemas de los Cantos que le parecen más bellos, más temporales, más eternos, y los traduce a otro, y lo prologa y anota mas como poeta, como paladeador de versos, que como erudito. El resultado es un acierto, donde lógicamente se hallan algunos de los indudablemente mayores hitos leopardinos: El infinito, A Silvia, Canto nocturno de un pastor errante de Asia, Amor y muerte o La retama, entre otros... Poemas que son calidad y placer, pero que sí tienen época. En Leopardi existe una retórica neoclásica convertida ardor romántico, como la hay en el mejor Keats, prácticamente su contemporáneo. Poesía de cincelada perfección formal pero tan pura de sentir, tan vibrante que atraviesa las épocas. Sin embargo los mejore poemas de un autor habrían de coincidir sustancialmente, y así los 20 poemas de Sánchez Rosillo son los mismos que deberá elegir cualquier estudioso del poeta. Sin casi utillaje académico, recalcado sobre todo lo poético, se nos ofrece un poeta esencial en el lenguaje fiel de otro poeta, que se quiere cerca. La iglesia románica de San Juan de los Caballeros, del siglo VI, ha sufrido en su historia avatares importantes hasta que en 1905, Daniel Zuloaga la compra e instala en ella su taller de cerámica y su vivienda, salvándola así del abandono al que estaba condenada. En 1931 fue declarada monumento histórico y en 1947 se decretó la creación del Museo Zuloaga. En ese mismo año, el Estado había adquirido numerosas piezas y compra la iglesia en 1955, instalando en ella en Museo Zuloaga, declarado monumento histórico en 1962. Esperanza Aguirre insistió en que el Ministerio de Cultura quiere colaborar en esta importante labor de conservación del patrimonio histórico-artístico de Segovia, y para ello ha previsto en sus presupuestos diversas actuaciones que se llevarán a cabo en el Museo de Segovia, el Monasterio de Santa María del Parral y la Biblioteca Publica de la ciudad. |