Una nueva derrota en la máxima competición del viejo continente aleja al Barcelona Lassa de conseguir sacar algo positivo de una temporada desastrosa. Los de Bartzokas prácticamente se quedan fuera de la siguiente fase, donde sí estará el Real Madrid pese a caer contra el Panathinaikos. El Baskonia se acerca a los cuartos con una gran victoria ante el CSKA.
El Barcelona no quiere ganar. Los culés se empeñan en demostrar que pueden empeorar su ya deprimente temporada y suman una nueva derrota, esta vez ante el Darussafaka Dogus por 67-56. El conjunto blaugrana se queda sin opciones para pasar a la siguiente fase de la Euroliga, aunque aún mantiene la posibilidad matemática de que se obre el milagro.
Los de Bartzokas solo estuvieron en el partido durante el primer cuarto. Tras los diez primeros minutos de juego igualado, el Barcelona desapareció, sufriendo un parcial de 32-9 a favor de los turcos que sentenció el duelo. En el conjunto catalán solo Perperoglou mantuvo el tipo, pero sus 16 tantos no fueron suficientes para acercar a la victoria a los visitantes.
Con 10 triunfos y 16 derrotas, los de la Ciudad Condal necesitarían un pleno de victorias y que sus rivales directos no ganen para poder clasificarse para cuartos de final, una misión que se antoja casi imposible viendo el nivel de juego desarrollado por los catalanes en la competición continental.
Con otros objetivos pero el mismo resultado acabó el encuentro entre el Real Madrid y el Panathinaikos. Los blancos cayeron derrotados por 88-82 ante el conjunto entrenado por Xavi Pascual, que supo defender con intensidad a un Doncic algo apagado y a un Sergio Llull especialmente desacertado en el manejo de balón.
Los madrileños fueron contracorriente todo el partido. La desventaja en el rebote y la frágil defensa de los de Laso no les permitió cerrar una remontada que por momentos rozaron, pero que Singleton se encargó de finiquitar. El Madrid continúa líder, y se enfrentará el miércoles en el partido del morbo al Barcelona, que puede dejar eliminados a los culés.
Quien sí supo hacer los deberes fue el Baskonia. Los vascos se impusieron al poderoso CSKA por 79-78 y encarrilan su clasificación para la siguiente fase del torneo. La victoria les mantiene en el top-8 a falta de cuatro jornadas, además del subidón de moral que les otorga haber derrotado al potente conjunto moscovita.
El conjunto vasco mandó prácticamente todo el encuentro, pero no pudo abrir grandes distancias. Con un partido igualado, el Baskonia supo dosificar esfuerzos y aguantar los envites que sufrían a manos de Nando de Colo y Milos Teodosic. Sus 41 puntos combinados fueron frenados por la acertada dirección de Tornike Shengelia y los esfuerzos anotadores de Adam Hanga, que se complementaron con un gran partido a nivel coral de los jugadores locales.
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