Actores: Tye Sheridan, Olivia Cooke, Ben Mendelsohn, Mark Rylance, Simon Pegg
Género: Ficción
Duración: 104
País: Estados Unidos
Año: XXII
Con poco más de dos meses de diferencia entre las dos películas que ha presentado este año (de momento), Spielberg muestra los dos temples que hay en él. Una seria y adulta, por describirla de alguna manera que le permitió dirigir, me atrevo a decir, con maestría Los papeles del Pentágono. Y la otra infantil, con la que ha podido llevar a la gran pantalla la novela de Ernest Cline
Steven Spielberg vuelve al cine de ciencia ficción y aventuras por la puerta grande con Ready Player One. Spielberg consigue una historia llena de entretenimiento, guiños ochentenos y referencias. Visualmente claro, trepidante y espectacular.
Escritor de la novela en la que se basa la película, y guionista de la misma, Ernest Cline, junto con Spielberg, traslada al espectador a un futuro distópico donde la realidad no es muy atractiva, pero existe un mundo virtual lleno de aventuras y posibilidades llamado Oasis.
Película muy visual, llena de referencias a otras películas, series, videojuegos y anime, que es imposible digerirlas todas de una sola vez. Hay incluso algunos guiños a las creaciones del propio director, con las que habrá que estar muy atento, porque puede que pasen desapercibidas.
Aunque siguiendo la obra maestra literaria de Cline, el film (como era de esperar) ha hecho algunos cambios. Mientras que el libro se basa en juegos y películas especiales de los 80, Spielberg ha insertado algunas referencias más actuales, lo que quizás llegue a incomodar a los seguidores de la verdadera historia. Su banda sonora es también un continuo recuerdo de la década ochentera.
Esta película posiblemente pase a ser culto junto con las demás de Spielberg como E.T., Jurassic Park, El diablo sobre ruedas o Indiana Jones.
Spielberg, con su gran sexto sentido para enganchar al espectador en su butaca, presenta junto a Ernest Cline un nuevo mundo, crea nuevos gustos, y revive géneros que casi habíamos olvidado.