Actores: Christian Bale, Joel Edgerton, Sigourney Weaver, Ben Kingsley, María Valverde...
Género: Aventuras
Duración: 151 minutos
País: EEUU
Año: XXII
El cineasta Ridley Scott regresa a la gran pantalla con Exodus: Dioses y Reyes, la épica versión de Moisés en su gran huida por salvar al pueblo hebreo de las garras del faraón egipcio. La película, protagonizada por el ganador del Oscar Christian Bale, muestra el lado más humano del personaje bíblico alejándose un poco de la divinidad y centrándose más en las relaciones humanas.
Bajo esta premisa tenemos una súper producción épica protagonizada por un gran Bale que lleva el peso del film bajo sus espaldas, grandes efectos visuales en un avanzado 3D y un guión con pocas sorpresas pero bastante humanizado. Y es que el director de Alien o Gladiator saca su artillería más pesada y dirige uno de los pasajes más famosos de la Biblia conocido por todos para mostrarnos, una vez más, pero de manera más terrenal, la huída del hombre que se enfrentó al imperio de Egipto para llevar a su pueblo hasta la Tierra Prometida y sus impresionantes diez plagas, dejando un poco de lado las creencias religiosas y algún que otro pequeño error histórico que han pasado por alto, teniendo en cuenta que es una adaptación de un capítulo de la biblia y de un personaje bíblico, no histórico.
La cinta se centra mayormente en la relación de amor y traición entre los "hermanastros" Moisés y el príncipe de Egipto, Ramsés, pero de una manera más cercana y menos divina. El único inconveniente es que dicha relación entre los dos personajes debería ser más fuerte y equilibrada pero lamentablemente queda claro quién lleva todo el peso de la historia. Christian Bale, quien encarna a Moisés, va cogiendo protagonismo a medida que va descubriendo la verdad sobre su persona y el destino que le depara. A partir de allí su vida cambiará y pasará de vivir en la realeza de Egipto a huir por el desierto. Una vez más, la interpretación de Bale tiene mucha fuerza, una mirada profunda y gran magnetismo con el público, sobre todo con el femenino al que seguro enamorará. Algo que le falta a su “hermano” en la pantalla, Joel Edgerton, un personaje que debería ser más fuerte y cruel, y en cambio queda blandengue y algo insípido.
El resto de personajes secundarios como Ben Kingsley, John Turturro, María Valverde o Sigourney Weaver aportan más bien poco a la historia aunque algunos brillan más que otros. En el caso de la actriz española María Valverde, que interpreta a Séfora, la mujer de Moisés, a pesar de tener un personaje importante, permanece en un segundo plano y le queda demasiado grande la producción, pero se salva de quedar mediocre.
Los efectos visuales no hay lugar a duda que son como el film, admirables. Aportan gran realismo y son muy brillantes, sobre todo el momento de las plagas de Egipto. Impresionante. Y el 3D aporta magnitud y cercanía porque logra que formes parte de ese éxodo junto a los personales. Un gran acierto.
Desde el punto de vista estético, el vestuario es espectacular. La calidad y la belleza de las prendas aportan un toque más enriquecedor y realista a la historia. Los encargados de esta pequeña obra de arte han sido sastrería española Cornejo que han confeccionado más de 200 prendas, donde 40 de ellas se podrán visitar en el Museo del Traje de Madrid. Y en cuanto a la música, más sabor español. El músico Alberto Iglesias ha sido el creador de esta épica banda sonora que es capaz de transmitir la grandiosidad de la película y de envolver a las escenas más espectaculares.
En definitiva, Scott vuelve a sorprender con un reparto repleto de caras conocidas, aunque algunas de ellas pasan sin pena y sin gloria, una gran escenografía y vestuario y, por último, duras y sangrientas batallas acompañadas de una buena banda sonora que nos recuerda un poco la esencia de su oscarizado film Gladiator. Una película, algo polémica, que merece la pena ver en pantalla grande con altas dosis de entretenimiento, acción y efectos visuales. ¿Te la vas a perder?
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