La semana pasada se recordará siempre en el parqué madrileño. Las protagonistas fueron las Ofertas Públicas de Adquisición de acciones (OPAs). Endesa cedió parte de su fama a empresas procedentes, en su mayoría, del sector inmobiliario. Mientras Acciona sorprendía al lanzar una OPA parcial sobre Endesa, Martinsa hacía lo propio sobre Fadesa y ACS con Iberdrola. Así, el selectivo alcanzó los 13.000 puntos.
Acciona ha adquirido el 10 por ciento de Endesa. La familia Entrecanales ha pagado un total de 32 euros por acción, cantidad superior al valor de la última cotización marcada por sus acciones y muy superior a la ofrecida por E.On. Además, Acciona ha anunciado sus intenciones de continuar comprando parte de la eléctrica para tener más poder de interferencia en la gestión de la empresa. El caso OPA’s energéticas se complica aún más tras más de un año de acontecimientos.
La Comisión Europea (CE) ha sido tajante: el Gobierno tiene que quitar las condiciones que impuso a E.On para que la Oferta Pública de Adquisiciones (OPA) sobre Endesa se llevara a cabo. Además, también obliga al ejecutivo español a anular el decreto por el que se ampliaban las competencias de la Comisión Nacional de la Energía (CNE). La suerte parece sonreír a la alemana, con la excepción de que tendrá que pagar bastante más de lo que pensaba para comprar Endesa.
La entrada de ACS en Iberdrola, a lo que se añaden rumores de fusión con Unión Fenosa, por un lado, y del grupo Acciona en Endesa, por el otro, han revolucionado en cuestión de pocos días el sector energético español.
La Asamblea francesa ha aprobado la unión entre la empresa pública de gas Gaz de France (GdF) y la privada Suez tras varios meses de duras negociaciones. Con esta operación, el Gobierno galo evita la entrada de la italiana Enel en su mercado energético nacional.
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