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ORIENTE PRÓXIMO

La violencia marca la semana en la que surgió una tregua no oficial

Fotografía
Por Salva Martínez MásTiempo de lectura1 min
Internacional29-06-2003

La situación del conflicto israelo-palestino oscila entre la guerra y la paz. Desde que organizaciones armadas palestinas como Hamás y Yihad Islámica anunciaran la tregua con Israel, se ha puesto más diplomacia en el camino de la paz. Incluso la asesora para Asuntos de Seguridad Nacional de Estados Unidos, Condoleezza Rice, está en la zona.

Rice se reunió el sábado pasado con el primer ministro palestino, Abu Mazen, y el domingo hizo lo propio con Ariel Sharon, primer ministro de Israel. Hay mucho de que hablar sobre todo cuando el fin de una movilización popular como la Intifada puede llegar a su fin. Mil días de esta movilización se han cobrado 3.500 víctimas, aunque podrían haber sido más porque el día que llegó Condoleezza Rice dos bombas explotaron cuando pasaban sendos vehículos blindados de la embajada de Estados Unidos. Que continúe la actividad violenta en pleno apogeo arroja muchas dudas sobre la efectividad del nuevo plan de paz: La Hoja de Ruta. Los palestinos piden que Israel deje la política de asesinatos selectivos y de detenciones del Ejército israelí. La reivindicación israelí exige el fin de la violencia y la autosuficiencia de la Autoridad Nacional Palestina (ANP) para cuidar de la seguridad de los territorios que antes ocupaba Israel. Por el momento, ambas partes han movido pieza, porque Hamás y Yihad Islámica sacaron a la luz un documento que apuesta por una tregua de tres meses. Esto ocurrió el pasado viernes. Por su parte, el Ejército israelí se pronunció sobre el abandono de los territorios que ocupan en el norte de Gaza y señaló que va a ser efectivo el lunes. Es decir, cuando aún no haya entrado en vigor la tregua propuesta. Según el texto anunciado por el líder espiritual de Hamás, el jeque Yassin, el alto el fuego se vivirá en 48 horas después de que sea anunciada oficialmente por la ANP.