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LUCHA CONTRA EL TERRORISMO

El Supremo ordena suspender a todos los grupos de Batasuna

Fotografía
Por Noelia Hernández MartínTiempo de lectura2 min
España23-04-2003

El Tribunal Supremo ha aportado algo más de luz a la compleja ejecución de la ilegalización de Batasuna. La Sala Especial ha declarado la ilegalidad de la formación abertzale y de sus grupos en todas las instituciones.

El Gobierno aprobó en junio de 2002 una nueva Ley de Partidos que establecía los márgenes y requisitos para que una formación política permaneciera dentro de los límites de la Constitución. A partir de este momento, Batasuna pasó a estar en el punto de mira. Pronto se ubicaría en la oscuridad de la ilegalización. El proceso se puso en marcha el 26 de agosto de 2002, cuando el Congreso y la Fiscalía General instaron al Tribunal Supremo a que dejara fuera de la ley a la formación independentista. De forma paralela, el juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón decretaba la suspensión de las actividades Batasuna y el cierre de sus sedes en un proceso penal paralelo al proceso político. Finalmente, el Alto Tribunal dictó el pasado 28 de marzo la sentencia que ilegalizaba a Batasuna, Euskal Herritarrok (EH) y Herri Batasuna (HB), y ordenaba el cese inmediato de sus actividades, entre otras razones, por su relación con ETA y la amenaza a los principios y sistema democrático. El auto arrojó al partido político al margen de la ley , pero no aclaró si afectaba al grupo parlamentario de Batasuna en el parlamento vasco. El Tribunal Supremo dictó el pasado miércoles un auto de ejecución de lo dispuesto en su sentencia de ilegalización. De esta forma, y en contra de la voluntad del Gobierno vasco, Batasuna no tendrá representación en la cámara. La sentencia debe extenderse "a la disolución de los Grupos parlamentarios constituidos por Batasuna en los Parlamentos vasco y navarro y también los grupos que posea dentro de las Juntas Generales de los Territorios Históricos, Diputaciones o Ayuntamientos". El Supremo ordenó también el embargo de todos los bienes o derechos de Batasuna así como la cancelación de cuentas corrientes y subvenciones. Hay que tener en cuenta que el Supremo no se refirió a la disolución de HB ni EH, sólo a la de Batasuna. La resolución tampoco implica a Sozialista Abertzaleak (SA), nueva denominación que ha asumido el grupo parlamentario de Batasuna en el Parlamento vasco. La Abogacía del Estado solicitó su disolución al Tribunal Supremo. Sin embargo, no se llevará a cabo hasta que se conozcan oficialmente los integrantes del grupo parlamentario SA y una comprobación judicial de su coincidencia con los integrantes del anterior grupo parlamentario de Batasuna. La Mesa del Parlamento vasco se reunirá el próximo 7 de mayo, víspera del comienzo de la campaña electoral, para estudiar la ilegalización de Sozialista Abertzaleak, y ha rechazado la petición de populares y socialistas de adelantar este debate, dado que el Supremo acaba de notificar el auto por el que se ordena la ejecución de lo dispuesto en la sentencia de ilegalización. El presidente del Parlamento vasco, Juan María Atutxa, ha justificado el rechazo a esta petición de la oposición porque no va a emprender acciones “preventivas” ya que aún no ha recibido materialmente la notificación del Supremo.