ANÁLISIS DE ESPAÑA

Entre Trueba y Banderas

Por Alejandro Requeijo2 min

España05-12-2016

Por si aún alguien habla de oídas, esto es exactamente lo que dijo Trueba sobre lo de sentirse español: "nunca he tenido ningún sentimiento nacional, siempre he pensado que, en caso de guerra, yo iría con el enemigo, siempre. Cuando leía la Historia siempre decía 'qué pena que España ganara la guerra de la independencia, a mí me hubiera gustado muchísimo que la ganara Francia'. Entonces, claro, que me den un premio nacional a una persona como yo es medio incorrecto, yo siempre he estado a favor de que hay que destruir las fronteras no hay que crear una nueva. La verdad es que yo nunca me he sentido español, nunca, en mi vida, jamás, ni cinco minutos de mi vida. En los mundiales siempre iba con las selecciones de otros países".

Alega el ganador de un Oscar por ‘Belle Époque’ que quiso hacer un chiste, lo que demuestra su torpeza y la evidencia de que a algunos les resulta muy fácil hacer humor siempre a costa de lo mismo, ora España, ora las víctimas de ETA, por citar dos ejemplos recientes. Igual que Zapata desistirá de ensayar estudios sobre el humor negro en Twitter, seguramente Trueba haya reflexionado sobre las consecuencias de reconocer públicamente que a él le pone más la guillotina gabacha que las Cortes de Cádiz. Todo esto sin que exista una garantía científica para demostrar que su batacazo en taquilla se deba a un boicot o simplemente a que su última película no le interesa a la gente. Y no está de más reconocer que ninguna de las dos posibilidades pone en cuestión el indudable talento de un cineasta que cometió un error por querer hacerse el gracioso.

Que se puede reivindicar el orgullo de sentirse español a través de sus éxitos lo acredita el discurso que pronunció un compañero del mismo gremio como Antonio Banderas el día que recibió el Goya honorífico por su carrera. "Hoy, con la figura de don Francisco de Goya en las manos, sé que son nuestros artistas, nuestros intelectuales y nuestra cultura, la mejor manera de saber lo que somos y de cómo hemos llegado hasta aquí. Y observando algunos de los paisajes que se ven a través de esa ventana brillante que todos tenemos en nuestras casas, y darnos cuenta de que la mediocridad se ha convertido en el mayor negocio de nuestro tiempo, hemos de volver a mirar, con los ojos bien abiertos, para tratar de desentrañar cuál es la advertencia que se esconde tras las obras de Goya, o de Picasso, para maravillarnos de cómo fueron capaces Falla, Tárrega, Albéniz o Granados para encajar a España en una partitura, o Cervantes, Unamuno, Valle Inclán, Lorca, Machado, Cernuda, Albornoz o Ayala tatuando sobre papel las miserias y grandezas de nuestro pueblo, también expresado, por supuesto, por Buñuel, Berlanga, Saura, Erice, mi queridísimo y admiradísimo Pedro Almodóvar, así como tantos otros". Ahí lo tienes, Trueba.