EL REDCUADRO

Mileuristas fiscales

Por Antonio Burgos3 min

Opinión05-12-2016

Lo iban a aprobar en el último Consejo de Ministros, pero al parecer lo dan dejado para mejor ocasión. Pero ya caerá. No sé si será una exigencia del PSOE para votar los presupuestos con los que Bruselas nos está metiendo prisa ("¡Rajoy, que es pá hoy!") o si se le ha ocurrido a Montoro por su cuenta. Lo que no se le ocurra a Montoro para meter la mano en nuestros bolsillos es que no existe. Y perdonen que aguante la risa; yo es que veo a Montoro y me dan ganas de decir como las madrazas sentimentalonas:

- ¡Qué lástima de hijo!

Y qué lástima de Hacienda española en sus manos. ¿Qué he dicho Hacienda española? Qué lastima de pérdida de los principios liberales que tanto predicar suelen en campaña electoral y que no sólo incumplen luego, sino que acaban pisando la raya de picadores de la economía comunista. Nunca un gobierno que se tiene por liberal ha recortado tanto las libertades económicas. Me río yo de los recortes en Educación y en Sanidad, de los que le echan la culpa a Rajoy las mareas blancas y de todos los colores, cuando son competencias transferidas (y en mala hora) a las autonomías. Me río de esos recortes tan demagógicamente utilizados contra el Gobierno, cuando los peores son los que le mete a nuestra libertad. Por ejemplo, a algo tan consustancial con el liberalismo como la libertad económica. Hablo de los 1.000 euros que quieren poner como tope para pagos en efectivo, aunque de momento aseguran que han dejado esa medida sobre la mesa del Consejo de Ministros, porque estaban preocupadísimos con la Coca Cola como objeto del deseo recaudatorio. Sí, contra las bebidas azucaradas, en las que nos cascarán otro buen viaje de impuestos. Y digo yo: a la Coca Cola light, o cero, o doble cero, ¿también le cascan el impuesto de bebidas azucaradas? A ver si os aclaráis, pichas mías, que nos vamos a hacer con la ídem un lío fiscal. ¿Va costar más barata la Coca Cola light que la clásica, por aquello de que Montoro no quiere que engordemos? Montoro, hijo: preocúpate menos de si engordamos o no engordamos con las bebidas azucaradas y no nos crujas poniéndoles impuestos a lo dulce. Preocúpate mejor de que no engorde la Administración, y el derroche de las autonomías y la bajada de pantalones ante los separatismos, y vamos a dejar tranquilitas a las bebidas azucaradas. En uso de la libertad: de la libertad de engordar y de ponernos como un sollo, frente a la dictadura de la moda de la delgadez.

Pero lo que me parece de verdad un ataque a la libertad por parte de un Gobierno que se tiene por liberal (de boquilla) es lo de los 1.000 euros de pago en efectivo como frontera poco menos que del delito fiscal. En vez de preocuparse por los mileuristas y sus condiciones laborales, nos quieren hacer a todos mileuristas fiscales. Todo el que pague en efectivo más de 1.000 euros es sospechoso de blanqueo de dinero e incluso de tener una cuenta en un lejano paraíso fiscal, en plan Cristiano Ronaldo. ¿Y por qué no voy a poder pagar con billetes, uno tras otro, como éstos, un producto o servicio que cueste más de 1.000 euros, si para hacerlo le exijo al tío que se lo apoquino mi factura legal con su IVA y todos sus avíos? ¿Por qué me obliga Montoro a tener que usar tarjeta de crédito? ¿Por qué por cada compra medio regularcita que haga voy a tener que tirar de tarjeta? Tarjeta, además, por la que mi banco me empieza ya a cobrar 3 euros al mes, la use o no la use. ¿Pero esto de los 1.000 euros de frontera de pago a tocateja, qué es, Dios mío de mi alma? ¿Una medida contra el dinero negro o a favor de los bancos? ¿Y si pago con un cheque no vale, Montoro mío, Montoro de mis amores? Nada, que este hombre quiere cargares la frase histórica que inventó don Ramón Areces en su Cortinglés y ahora perpetúan también en Mercadona: "¿En efectivo o con tarjeta?". Con tarjeta, hija, con tarjeta. Porque Montoro hasta no deje a los billetes con el valor del dinero del Monopoly, no va a parar..