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Latinoamérica

Continúa la tensión en Venezuela

Por Luis Lautenschlaeger FeijóoTiempo de lectura4 min
Internacional19-05-2016

Los conflictos en Venezuela continúan multiplicándose. La policía frenó el pasado miércoles la marcha de la oposición y de miles de ciudadanos hasta la sede del Consejo Nacional Electoral en Caracas, con el fin de agilizar el proceso hacia el referéndum revocatorio del presidente Nicolás Maduro. Los movimientos también se dieron en otras ciudades de la nación, orientados a protestar contra el líder y la situación económica, social y política que atraviesa el país, y podrían incrementarse durante los próximos días.

Las fuerzas de seguridad bloquearon el pasado miércoles la marcha de miles de opositores cuyo objetivo era llegar a la sede del Consejo Nacional Electoral y reclamar la aceleración del proceso hacia el referéndum revocatorio de Maduro.

A esta marcha le acompañaron diferentes manifestaciones en otras ciudades del país, que la policía trató de parar utilizando bombas lacrimógenas y balas de goma. Estos conflictos entre los cuerpos de seguridad y los ciudadanos dejaron más de 18 heridos y decenas de detenidos. En los hechos también resultaron lesionados cinco policías, indicó la Fiscalía General.

Según han informado las autoridades, la marcha no tenía el permiso de las mismas, por lo que no estaba autorizada. De ahí a que cerraran todas las vías de acceso a la sede del Consejo, en el centro de Caracas. En cambio, y a pesar de ello, los dirigentes de la Mesa de Unidad Democrática (MUD) consiguieron dirigentes que pudieron entregar un documento con peticiones al rector electoral Luis Emilio Rondón.

El líder de la oposición, Henrique Capriles, ha criticado duramente la violencia y los conflictos que se vivieron durante toda la tarde, según él dirigidos por “infiltrados del Gobierno”. Del mismo modo, aseguró que además de en Caracas en otras 22 ciudades se organizaron manifestaciones y protestas a favor del referéndum, como es el caso de Valencia, Barinas, Mérida y la isla de Margarita, y que continuarán llevando a cabo movilizaciones durante los próximos días. “Nosotros vamos a hacer que el señor Maduro entre por aquí por el carril, lo vamos a obligar a que él respete la constitución”, señalaba.

Cabe recordar que todos estos conflictos llegan en un momento sumamente delicado para la nación sudamericana. Por un lado, cabe destacar la crisis energética que vive el país desde hace meses a causa del fenómeno natural El Niño y las medidas adoptadas por Maduro contra la misma, muchas de ellas no aceptabas por el pueblo venezolano, como las 4 horas sin luz que impuso el líder del Gobierno. Por otro lado,  se encuentra el reciente decreto del estado de excepción y emergencia económica por parte de este, que trae consigo la suspensión de numerosas garantías constitucionales y que tiene como único fin evitar un golpe de Estado.

Asimismo, desde la victoria de la oposición en las elecciones parlamentarias, el mandatario se ha valido de su poder y de su influencia el Tribunal Supremo y el Consejo Electoral para mantener el poder y evitar el referéndum revocatorio, lo que también ha incrementado la crispación de los ciudadanos, que ven como su voto apenas ha servido para provocar cambios en Venezuela.

Tal es la situación crítica que atraviesa el país, que las respuestas internacionales no han tardado en llegar. José Luis Rodríguez Zapatero junto con Martín Torrijos y Leonel Fernández, ex presidentes de Panamá Y República Dominicana respectivamente viajaron el pasado martes para mediar entre el Gobierno y la oposición. Así, Capriles ha asegurado que este jueves se reuniría con ellos. Tampoco ha pasado desapercibido el conflicto para Estados Unidos desde donde han reclamado la necesidad de que “los líderes de Venezuela escuchen la voz de su pueblo”. “Estamos profundamente preocupado por las difíciles condiciones que está experimentando el pueblo por la escasez de alimentos y medicinas”, resaltaba John Kirby, portavoz del Departamento de Estado.

Sin embargo, las  respuestas no han llegado únicamente del exterior, y el secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro acusó el miércoles a Maduro de traicionar a su pueblo y lo calificó como un “dictadorzuelo más, como los tantos que ha tenido el continente”. “Es necesario devolver los presos políticos a sus familias, su legítimo poder a la Asamblea Nacional y a los venezolanos la decisión sobre su futuro”, reclamaba.

Los conflictos podrían acentuarse durante los próximos días, dado que este mismo miércoles, Maduro ha anunciado que tiene preparado un decreto de conmoción interior. A pesar de que no se conoce con detalle que consecuencias podría tener el mismo, el líder sudamericano ha comunicado que como jefe del Estado, no dudaría en decretarlo si “se desataran hechos golpistas violentos”, con el fin de “combatir por la paz y la seguridad del país”.