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UCRANIA

Una Ucrania fragmentada pide ayuda a la ONU

Por Fernando GarcíaTiempo de lectura2 min
Internacional14-04-2014

Occidente sigue expectante ante la situación ucraniana. El presidente interino, Alexandr Turchínov, ha solicitado la ayuda de la ONU para realizar una operación antiterrorista conjunta en los territorios orientales. Este ofrecimiento llega tras fracasar su proposición de entrega de las armas que vencía el lunes 14 de abril a las 9:00. Como respuesta, los independentistas prorrusos han dado otro golpe de efecto y han tomado al asalto una sede de la seguridad en la ciudad de Gorlovka. Desde Kiev ya han autorizado una intervención en el este del país para evitar que la región de Donetsk siga los pasos de Crimea.

La petición del mandatario ucraniano parece ser un movimiento estratégico en pos de la búsqueda de un apoyo internacional más directo. Tras la pérdida de Crimea y su adhesión a la vecina Federación Rusa, el inmovilismo internacional parece haber dado alas a los movimientos insurgentes que buscan imitar a la península secesionista. La proclamación de independencia de la república de Donetsk el pasado lunes 7 de abril ha creado un movimiento de contagio en la regiones más orientales de Ucrania. La tensión creciente amenaza con provocar un enfrentamiento armado entre la república ex soviética y el gigante ruso. De la conversación entre el presidente ucraniano y Ban Ki-moon, secretario general de Naciones Unidas, se puede desprender un interés de Kiev por una intervención extranjera: "Ucrania no está en contra, sino a favor, de que con su ayuda (de la ONU) se lleve a cabo una operación antiterrorista conjunta en el este" ha afirmado Turchínov. La intención de que esta acción se desarrolle conjuntamente busca legitimar un uso de la fuerza en territorios con mayoría rusófona. Sin esperar la respuesta de la ONU, Kiev ha pasado a la acción. El Gobierno ha firmado un decreto para poner en marcha la operación antiterrorista, cuyos detalles se mantienen en secreto. Para justificar esta maniobra, el jefe del Gobierno ucraniano ha argumentado que la seguridad de la población civil está en peligro, ya que los movimientos de los separatistas son orquestados por milicias infiltradas desde Rusia. “El Gobierno de Ucrania no permitirá la repetición del guión de Crimea en las regiones orientales de Ucrania", ha recalcado Turchínov. Lejos parece encontrarse un final pacífico para este conflicto que no deja de crecer en intensidad.