Violencia machista

Aumentan los casos de violencia sexista entre menores

Por Adriana Robledo3 min

Sociedad24-11-2013

Aumentan los casos de violencia sexista entre menores, según un estudio realizado por la Universidad Complutense de Madrid. Este estudio afirma que el 10,5% de las adolescentes han sufrido maltrato, frente al 9,6% de 2010. La explicación de este aumento se puede encontrar en el avance de las nuevas tecnologías y sobre todo a través del móvil. Con esta herramienta, cuya función es comunicarse, las menores maltratadas reciben insultos o incluso amenazas.

El incremento de los casos de violencia sexista ha crecido con respecto a 2010 cuando se registraba un 9,6 por ciento frente al 20,5 actual, según el estudio La evolución de la adolescencia española sobre la igualdad y la prevención de la violencia de género. De este porcentaje, casi el 29 por ciento de las jóvenes de entre 13 y 19 años reconoce haber sufrido o, incluso, estar sufriendo, un control abusivo por parte de su pareja o ex pareja. La mayor parte de este control, el 25,2 por ciento se realiza a través del teléfono móvil. Las chicas ridiculizadas e insultadas y aisladas de sus amigos, un 23,2 por ciento en ambos casos, es la práctica más habitual en el maltrato a jóvenes. El 11,6 por ciento reconoce que ha sido menospreciada mientras que el 15 por ciento ha sido atemorizada y un seis por ciento admite que ha sido obligada a realizar prácticas sexuales que no quería. Sólo un tres por ciento admite haber sido golpeada. Los chicos que reconocen haber realizado estas prácticas son muchos menos. "La he insultado y ridiculizado" (13,2%); "le he dicho que no valía nada" (7,2%); "la he tratado de controlar decidiendo por ella hasta el más mínimo detalle" (16,2%); "le he hecho sentir miedo" (8,7%); "la he presionado para que realizara conductas de tipo sexual en las que no quería participar"(6,1%). La mayoría de estas prácticas han sido vía Internet. Pero, aún con estos datos, las nuevas tecnologías no tienen enteramente la culpa. Los adultos también tienen gran parte de culpa por la transmisión de ideas machistas a sus hijos cuyo resultado es, además de la violencia de género, que el ideal de igualdad entre ambos géneros sea, a día de hoy, sólo eso: un ideal. El 73,3 por ciento de los adolescentes varones ha escuchado que “los celos son una expresión de amor” mientras que el porcentaje de chicas que lo han oído “a menudo” o “con frecuencia” es de un 35,8 por ciento, frente al 29,3 del año 2010. El de chicos se sitúa en el 36,8 por ciento mientras que en 2010 estaba en el 29,3 por ciento. El psicólogo clínico de la Fiscalía de Menores y el ex defensor del menor de la Comunidad de Madrid, Javier Urra, considera esta realidad como “absolutamente preocupante”. "Estoy profundamente asustado con la violencia que entienden los jóvenes varones que hay que emitir hacia las chicas y más preocupado aún por la aceptación que parecen tener ellas", señala el psicólogo. Además, los roles dentro de la pareja “no son los propios ni naturales de la relación de pareja”. La presidenta de la Federación de Mujeres Progresistas, Yolanda Besteiro, ha comentado que, según los nuevos datos, “no se ha avanzado tanto en igualdad como parecía”. "Tenemos un problema serio porque nos parece que hemos avanzado mucho y ellos viven en una falsa apariencia de igualdad, pensando que porque hay educación mixta ya es suficiente, pero no nos damos cuenta de que nuestra sociedad no es coeducativa", ha matizado. El informe que su asociación ha elaborado con datos de estudiantes de la ESO y Bachillerato revela el 80% considera que ella debe satisfacer las necesidades de él en la pareja, el 60% ve con normalidad los celos y el 30% cree que la chica se "realiza" cuando tiene novio. "Tenemos este caldo de cultivo encima de la mesa", ha añadido. Para reducir este problema, el Consejo de Ministros aprobó un presupuesto de 41,6 millones de euros destinados para las Comunidades Autónomas. El fin de esta cantidad es para programas sociales, lucha contra las drogas y la asistencia a víctimas de violencia de género.