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ASIA

Japón y China continúan con su enfrentamiento territorial

Por Alba Gómez VarelaTiempo de lectura2 min
Internacional18-09-2012

La oleada de manifestaciones y actuaciones desde Tokio y Pekín han continuado sin cesar desde el anuncio del Gobierno nipón de comprar parte del archipiélago Diaoyu. Decenas de miles de personas han salido a la calle en China y la embajada de Japón en la capital del país ha sufrido el ataque de los enfurecidos en el 81 aniversario del "incidente de Mukden". Mientras, crece el temor internacional por la escalada en el conflicto entre estas grandes economías.

China ha aumentado el tono del conflicto diplomático que mantiene con Tokio por las Diaoyu al anunciar que se reserva el derecho de emprender más acciones contra su país vecino. Los chinos, en apoyo a su Gobierno por recuperar las islas, han salido a la calle en masa el mismo día que se cumplen 81 años del incidente que dio lugar a que Japón ocupara Manchuria en 1931, lo que China sigue tomándose como una humillación hacia su país. Entretanto, Japón ha extremado la vigilancia en torno al archipiélago que se encuentran en su centro de atención. Ante el rodeo por parte de barcos chinos del territorio disputado, el primer ministro japonés, Yoshihiko Noda, ha asegurado que incrementará la vigilancia y el control de las aguas cercanas al mismo, que cuenta con importantes recursos pesqueros y contiene reservas de hidrocarburos. Además, varias empresas japonesas continúan con su decisión de paralizar temporalmente sus operaciones en China, como Sony y Mitsubishi Electric o Toyota, alegando que la motivación de esta actuación es la poca seguridad para sus empleados y productos. Toda esta tensión comenzó hace una semana, en el momento en el que el Gobierno japonés informó de que compraría tres islas de las cinco de las que se compone el archipiélago Diaoyu. Esta compra la realizaría, según se comunicó, a su propietario privado por la cantidad de 2.000 millones de yenes, que equivale a 20 millones de euros. Dicho plan estaba ya entre los asuntos nipones desde junio de este año, momento en el que Osamu Fujimura, jefe del Gabinete, hizo pública su intención de cambiar el contrato de arrendamiento que se tenía sobre el territorio por uno que garantizara su control sobre las islas. No obstante, para entender la amplitud del conflicto hay que remontarse hasta 1895, cuando Japón se anexionó parte del archipiélago, donde construyó una planta procesadora de atún que cerró en 1940 y las islas quedaron sin actividad. Posteriormente, entre 1945 y 1972 el territorio estuvo bajo dominación estadounidense y, desde entonces, China y Taiwán han reclamado su soberanía. Las razones de China son que descubrió el archipiélago en el siglo XIV, por lo que algunas de sus islas pertenecen a la ciudad de Toucheng, en el condado de Yilan. Japón, por su parte, insiste en que todas son de la ciudad de Ishigaki, en Okinawa.