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15-M

El 15-M aspira a transformar el sistema político actual

Por Marta Baena SanzTiempo de lectura2 min
España13-05-2012

Los indignados se quejaban de que la juventud nacida en los sistemas capitalistas era cada vez más materialista y conformista respecto a las decisiones políticas, una actitud que muchos recriminaban, ya que si el futuro del país no se revelaba contra las injusticias, nadie lo haría por ellos.

De esta manera, en 2011 nació el 15-M que abanderó el movimiento ¡Democracia Real Ya!, que congregaba a una multitud de ‘indignados’ con el sistema, las medidas y los recortes, provocados por la crisis económica, y que afectaba sobre todo a los más jóvenes. Esta iniciativa nacida en España se extendió desde la misma Puerta del Sol de Madrid hasta otros muchos lugares del mundo. De esta manera, los ‘occupy’ han llegado a Nueva York, París, Berlín, Londres, Río de Janeiro y Caracas, entre otros, donde no importan sus nombres, sino la causa común por la que luchan. Por eso, este mayo ha sido bautizado como ‘Global May’ ya que un total de 160 ciudades de todo el mundo han celebrado el aniversario, un año después de que se iniciara una manifestación que desembocó en este movimiento. Nació en plena campaña electoral, durante las fiestas de San Isidro, los indignados exigían una democracia real y se hacían eco de los problemas, que en tiempo de crisis, aquejan a la sociedad: la vivienda, el sistema electoral y el mercado laboral. Ahora, un año después, sus objetivos continúan siendo los mismos, y las armas con las que cuentan para hacerse notar es su presencia multitudinaria en las grandes plazas de las ciudades que han tomado. A pesar de que muchos han identificado a los ‘indignados’ con la izquierda, según una encuesta del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) la manifestación del 2011 significó un cambio positivo para la derecha durante las elecciones a la presidencia de Madrid ya que hasta un 11,3 por ciento de los votantes que en 2008 habían depositado su confianza en Zapatero, cambió de parecer votando al Partido Popular de Esperanza Aguirre. Por eso, según el CIS, sería una equivocación asociar el 15M con una ideología izquierdista, a pesar de que Izquierda Unida ha apoyado el movimiento. No obstante, a los indignados poco le ha importado si el gobierno era de PSOE o del PP, ya que nada les ha impedido volver a la Puerta del Sol, entre otras muchas plazas, para recordar a la sociedad que la causa por la que luchan continúa latente, que los problemas no se han aminorado, y que después de muchos años, la juventud vuelve a salir a la calle en defensa de un mundo mejor.