Elecciones

Los conservadores ganan las elecciones en Portugal

Por Caterina Crespo1 min

Internacional06-06-2011

Tras las elecciones del pasado domingo, Passos Coelho se establecerá cuanto antes como primer ministro de Portugal. Conocido como el líder de la oposición y candidato del conservador Partido Social Demócrata (PSD) de Portugal. Elecciones anticipadas que han finalizado con casi el 39% de los votos, desbancando del poder a los socialistas de José Sócrates que han perdido 21 escaños. Passos Coelho no tardará en reunirse con el líder de la tercera fuerza política del país, el ultraconservador Paulo Portas. Su partido, el Cristianodemócrata, se quedó anoche a las puertas del 12%, aumentando también el número de escaños. Para Paulo Portas, sus 24 diputados representan una gran victoria al ser el mismo número de los dos partidos de la izquierda radical juntos. El Bloco de Esquerda es junto con los socialistas, el partido que más ha caído en estas elecciones, pasando de 15 a ocho diputados. Se abre una nueva etapa política en la que, en principio, se espera un mayor diálogo parlamentario y se pondrá fin a la crispación que se ha vivido durante los últimos meses.

Los tres partidos mayoritarios, socialdemócratas, socialistas y cristianodemócratas, se han comprometido a implementar el programa de ayuda externa de 78.000 millones de euros y a llevar a cabo reformas estructurales por el bien de Portugal. Passos Coelho, reiteró su compromiso de devolver al país la credibilidad internacional y recuperar la confianza de los mercados financieros. Además, tiene por delante el reto de reducir la elevada tasa de desempleo, por encima del 12% por primera vez en la democracia lusa, y hacer que la economía con un 2% de recesión vuelva a subir. Además de un deterioro palpable de las condiciones sociales, con un millón de ancianos que tienen necesidades básicas insatisfechas y 350 mil personas que requieren de asistencia alimentaria. José Sócrates, de 53 años, llevaba al frente del Gobierno desde febrero de 2005, y su Gobierno ha acabado en una profunda crisis económica. La amplia victoria de Passos Coelho abre un nuevo escenario político que pone fin al dominio socialista. Pero con 105 escaños, no tiene la mayoría absoluta (la mitad más uno de los 230 diputados del Parlamento unicameral portugués), lo que le obliga a negociar con el CDS, con 23 diputados, una alianza que será una reedición de la coalición que gobernó Portugal entre marzo de 2002 y febrero de 2005. Entre tanto la sociedad portuguesa pide a gritos, cambios, reformas y que se acabe el difícil periodo económico que están viviendo.