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IPC

A pesar de las rebajas, la inflación sigue subiendo

Por La SemanaTiempo de lectura2 min
Economía14-03-2002

A pesar de que el nuevo método de cálculo de la inflación incluye las rebajas y por tanto el impacto en el aumento de los precios debería ser menor, los precios han vuelto a aumentar durante el mes de febrero.

El sector de la hostelería ha sido el culpable del incremento en una décima de los precios durante el mes de febrero. No obstante, la tasa interanual se mantiene en el 3,1 por ciento, en el mismo punto en que se situó el pasado enero. Los datos españoles, hechos públicos por el Instituto Nacional de Estadística (INE), contrastan bastante con los europeos. Alemania, pese a la recesión que sufre su economía, mantiene su tasa interanual en un 1,7 por ciento y Francia en un dos por ciento. Haciendo la media con el resto de las inflaciones europeas, España tiene una tasa diferencial de un 0,6 por ciento en comparación con los demás países de la eurozona. El nuevo, y polémico, sistema de cálculo del IPC incluye los precios de las rebajas y, como éstas duran hasta el mes de febrero, no se esperaba que la inflación aumentase. Pero a pesar de todo, los precios se han incrementado. La razón hay que buscarla en el aumento de un 1,3 por ciento de los precios en los hoteles y un 0,9 por ciento de los bares y restaurantes. Pero no sólo eso, el precio de los medios de transporte públicos se elevaron un 0,4 por ciento y los medicamentos lo hicieron un 0,6. Ante estas alzas de los precios, las rebajas no han podido modificar en exceso los datos inflacionarios. El secretario de Economía, José Folgado, ha calificado los datos como “positivos” ya que a nivel internacional “se está pasando por una difícil coyuntura económica”. Folgado también avisó de que muy posiblemente la inflación de marzo sea aún mayor, porque durante este mes las rebajas ya no tendrán ningún tipo de influencia. Desde las filas de la oposición, el secretario de Política Económica del PSOE, Jordi Sevilla, ha calificado los datos de “manipulación grotesca” en relación al nuevo sistema de cálculo. Las patronales han mostrado preocupación por los datos y los sindicatos han culpado tanto a los empresarios como al propio Gobierno.