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AUDIENCIA NACIONAL

Garzón abre otro frente con la Fiscalía con su investigación de Guantánamo

Por Martín CastroTiempo de lectura2 min
España29-04-2009

Ha vuelto a pasar. El juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón ha sorprendido con su enésima pirueta judicial. En el acto de posesión del nuevo presidente de la Audiencia Nacional el magistrado --quien también optó a ese puesto-- decidió abrir una investigación contra los posibles “autores, inductores, cooperadores y cómplices” de los delitos de torturas en Guantánamo.

Fue la misma tarde de la toma de posesión de Ángel Juanes como presidente de la Audiencia Nacional. Acto que quedó relegado a un segundo plano tras el anuncio de Garzón. El juez dijo que abrirá una causa para investigar las torturas de Guantánamo durante el Gobierno de George Bush. Y lo ha hecho desempolvando un sumario abierto en 2003 contra el conocido como el talibán español, y otros tres presuntos terroristas. Según el auto judicial, la investigación se basará en las denuncias de cuatro hombres que estuvieron presos en Guantánamo: el español Hamed Abderramán Ahmed, el marroquí residente en España Lhacen Ikassrien, el palestino Jamiel Abdelatif Al Banna y el libio Omar Deghayes. Es la réplica de Garzón a la oposición frontal que mostró el fiscal general del Estado, Cándido Conde-Pumpido, a la querella presentada contra los juristas estadounidenses que planificaron el régimen legal de Guantánamo. Una querella que Conde-Pumpido llegó a calificar de fraudulenta y dijo que admitirla sería como convertir la jurisdicción universal en “un juguete en manos de personas que buscan protagonismo”. Ni el informe del fiscal contrario a la admisión a trámite de la querella citada ni la remisión de la misma al Decanato para que procediera de nuevo a su reparto -finalmente ha recaído en el Juzgado de Eloy Velasco- han supuesto impedimento alguno para que Garzón haya decidido investigar por su cuenta. El magistrado reaviva así unas denuncias que conocía desde hace varios años y a las que no prestó atención en su momento, pero con las que pretende encumbrarse a la dirección de una causa general contra la Administración Bush, objetivo último de esta instrucción. Garzón ya ha reclamado al juez Ismael Moreno que le remita las diligencias por los vuelos de la CIA, alegando la conexión con las supuestas torturas a presos islamistas. Este paso dado por Garzón abre una nueva cruzada con la Fiscalía. El enfrentamiento entre ambos está latente desde la operación Gürtel. En dicha investigación, el juez --que fue querellado a cuenta de la instrucción del caso-- y la Fiscalía mantuvieron un pulso en relación a los tiempos y las competencias del caso.