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VISITA DE ESTADO

Sarkozy sella en España el compromiso de Francia para acabar con ETA

Fotografía
Por Esteban del PozoTiempo de lectura2 min
España30-04-2009

“Cada vez que la democracia española necesite a la República Francesa en su lucha contra los asesinos podrá contar con la República Francesa”. De esta forma tan categórica, el presidente francés, Nicolas Sarkozy, arrancaba los aplausos unánimes del Congreso de los Diputados que fue testigo del compromiso inequívoco de Francia en la lucha contra ETA.

El presidente de la República Francesa visitó España, donde se reunió con el presidente del Gobierno, Jose Luis Rodríguez Zapatero y mantuvo un encuentro con el Rey Juan Carlos en el marco de un viaje oficial en el que la colaboración en la lucha contra ETA y el crimen organizado fueron los temas principales. Sarkozy estuvo en el Parlamento y sus primeras palabras fueron contra el mayor “enemigo” que “aún tiene la democracia en España”, el terrorismo de ETA. El presidente francés quiso alejar los fantasmas del pasado, en el que la ayuda francesa contra ETA distaba mucho de la que existe en la actualidad, y no perdió el tiempo para dejar “las cosas claras: Francia no tiene un doble discurso“. El líder galo quiso aclarar que la colaboración de Francia en esta materia será siempre "independiente de los gobiernos que ustedes elijan", y recordó que ese trabajo común ha existido tanto con el Gobierno de Aznar como con el de Zapatero. Aunque durante el franquismo y los primeros años de democracia, Francia consideró a los etarras como exiliados políticos, ahora Francia, según su presidente, “perdería su honor si fuera un santuario para los terroristas” y por eso recordó que “en una democracia la batalla se libra en las urnas y quien pretenda ganarlas escondiéndose detrás de las bombas no es más que un asesino y Francia luchará contra ellos hasta que no quede ni uno”. No dejó escapar la ocasión el máximo mandatario de uno de los países vecinos de España para remarcar su receta para acabar con el fanatismo terrorista. Posición que comparte con todo el Partido Popular Europeo y que no es otra que la persecución hasta el agotamiento de todos y cada uno de los que empuñan una pistola y los que los apoyan mediante la vía policial y penal que tan buenos resultados está dando con la caída de tres jefes de la banda en menos de tres meses. Así aseguró Sarkozy que la democracia no puede “transigir” con los terroristas porque los asesinos “no ven la mano tendida, sino la debilidad”. Además añadió que en esta lucha no se puede hacer “partidismo” y afirmó que cuando el PP y el PSOE “van más allá de sus diferencias”, “el conjunto de Europa aplaude y admira la democracia española”. El resultado de esta colaboración entre ambos países ha sido decisiva para la situación de debilidad que vive la banda hoy. Así lo reconoció el Rey Juan Carlos que agradeció el comportamiento de Francia en este tema en el que el país vecino de España también ha salido beneficiado. Tan fructíferas han sido estas relaciones que Francia está dispuesta a ir más lejos y propuso a Zapatero intensificar esta colaboración. Además de la lucha contra ETA se planteó la posibilidad de aumentar la vigilancia y el intercambio de información entre la policía francesa y española para acabar con el crimen organizado y el tráfico de drogas.