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TENIS

Andy Murray eclipsa a la ¬Armada¬ en Madrid

Por Álvaro DíazTiempo de lectura4 min
Deportes19-10-2008

La última edición del Masters Series de Madrid evidenció el buen estado en que se encuentra el tenis español. En especial Rafael Nadal y Feliciano López desempeñaron un buen papel en la competición madrileña. Pero ninguno fue capaz de hacer sombra a Andy Murray, que se destapó como el más consistente y se llevó el título. Entre los favoritos hubo sorpresas, pues Novak Djokovic y David Nalbandián se despidieron muy temprano de la capital española.

El paso de los españoles por la última edición del Masters Series de Madrid gozó de grandes momentos, pero también de tropiezos sorprendentes. Nueve fueron los tenistas nacionales que llegaron a Madrid dispuestos a darlo todo por no defraudar a su público. Lideraba la Armada Rafael Nadal, que estrenó en la capital española su título como número uno del mundo. La primera jornada ya comenzó a dividir el destino de los españoles. Tommy Robredo, que nunca había llegado a las últimas fases, vencía su duelo, mientras que Nicolás Almagro, tras una temporada de altibajos marcados por diversas lesiones, cayó derrotado enseguida. Más tarde le llegó el turno a Nadal, que llegó a este acontecimiento rodeado de rumores sobre posibles lesiones. Sin embargo, el de Manacor no defraudó y salió airoso de su enfrentamiento con Ernest Gulbis, mostrándose en plena forma y cerrando las dudas entorno a su estado de forma. En la primera ronda, sorprendió la derrota de Carlos Moyà. Por el contrario, Marcel Granollers presentó su candidatura como relevo de las grandes estrellas del tenis español. El catalán firmaba una buena actuación que le mantenía vivo en el torneo. Feliciano López dejó en la estacada al también español Albert Montañés. Junto a él, se despidió también de la competición el tenista madrileño Fernando Verdasco que, pese a jugar en su tierra, no sacó adelante su partido de segunda ronda. Apenas había arrancado el Masters y prácticamente la mitad de los españoles ya habían dicho adiós. Sin embargo, hombres importantes como Nadal y Feliciano, que derrotó también a David Ferrer, mantenían a flote las esperanzas de coronar a un español campeón. En dieciseisavos de final, el manacorí y Feli se destacaron claramente como los tenistas españoles más en forma, al quedar eliminados Granollers y Robredo. Los dos supervivientes españoles volvieron a cumplir en la siguiente ronda y ambos se citaron en cuartos de final para optar a un puesto en las semifinales. La eliminatoria se resolvió a favor del manacorí. El jugador toledano culminó así su gran participación en el Master, demostrando una vez más que su juego mejora a medida que avanza la temporada. Las ilusiones de los seguidores españoles se posaron entonces sobre Nadal, primer favorito. Sin embargo, el tenista nacional cayó en semifinales, en un durísimo partido contra Gilles Simon. Floja actuación de los favoritos Aparte de Nadal, el resto de favoritos llegaban al Master Series de Madrid en buena forma y con grandes expectativas. Pese a la sorprendente derrota del estadounidense James Blake en su debut, el resto cumplió en los primeros compases de la competición. Roger Federer, segundo favorito, avanzaba con un gran juego y ya se le veía en la final. Novak Djokovi, pese a sufrir para superar a su rival, logró también estrenarse con victoria. Por último, el actual defensor del título de Madrid, David Nalbandian, conseguía acompañar también al resto de favoritos. Pero las sorpresas llegaron en los octavos de final. Aquí fue donde los grandes del torneo empezaron a venirse abajo. Nalbandian caía derrotado en su enfrentamiento fratricida contra Juan Martín del Potro, y Djokovic obtenía idéntico resultado, esta vez, frente Ivo Karlovic. Nadal, Federer y Andy Murray, número cuatro del mundo, empezaron a atraer entonces toda la atención. No sólo por ver quién acabaría alcanzando la final, sino porque además estaba en juego el título de número uno. Nadal debía llegar a la final si quería conservar su puesto de líder de la ATP. Fue entonces, en semifinales, cuando se fraguó el resultado más atípico. Ni el manacorí, mejor jugador del mundo, ni el suizo, segundo favorito, consiguieron clasificarse para la final. Pese a ello, Nadal podrá mantenerse como número uno hasta final de año. En vista de los resultados, el único jugador que cumplió con las expectativas fue Murray, que llegó a la fase final y acabó proclamándose campeón del Masters de la capital española. Lo hizo ante la gran sorpresa del torneo, Gilles Simon, que cautivó al público madrileño. El escocés sumó así su cuarto título del año y certificó, con su buen juego, su gran progresión.