IRAQ
Sarkozy y Bush difieren sobre qué hacer con la situación iraquí
Por Carmen Benítez2 min
Internacional02-09-2007
Sarkozy y Bush continúan con sus ideas contrarias sobre qué tipo de política hay que llevar en la guerra de Iraq, ya que el presidente francés quiere la retirada de las tropas y el estadounidense pide dinero al Congreso para continuar la lucha.
El panorama de Iraq se complica poco a poco con cualquier acto que haya. Los enfrentamientos sectarios que se desataron la noche del lunes y continuaron el martes de la semana pasada se saldaron con la muerte de, al menos, 51 personas y 247 heridos en la ciudad santa chií de Kerbala. Más de un millón de peregrinos se dieron cita procedentes de todo el mundo para conmemorar el nacimiento del duodécimo imán que permanece oculto desde el siglo IX. El presidente de Francia, Nicolas Sarkozy, ha hecho gala de su vocación transatlántica en su primer discurso de Política Exterior desde su elección en mayo, al abogar por potenciar la "amistad" de una Europa "fuerte" con EE.UU. Pero el jefe de Estado reiteró el rechazo a la intervención de Estados Unidos en 2003 y exigió a los países que integran las tropas de la coalición en Iraq que definan "una perspectiva clara" de retirada de los soldados. Esto beneficiaría al proceso y sólo a partir de ese momento la Comunidad Internacional "podrá actuar de modo más útil", incluida Francia, según Sarkozy. El ministro francés de Exteriores, Bernard Kouchner, visitó Iraq entre el 19 y el 21 de agosto y se entrevistó con las autoridades y con representantes de diferentes comunidades étnicas, a quienes transmitió su solidaridad y respaldo en el proceso de reconciliación. Las diferencias con Bush respecto a este tema son claras ya que el presidente de Estados Unidos ha pedido más presupuesto al Congreso. El coste de la guerra en Iraq y Afganistán se elevará a 115.000 millones de dólares este año en EE.UU. si el Congreso acepta la partida de urgencia de 65.300 millones de dólares que ha presentado el presidente. Con esta cantidad, la guerra en ambos países habrá costado a las arcas estadounidense más de 400.000 millones de dólares desde su comienzo. Además de los 65.300 millones solicitados, el Gobierno pide también 4.200 millones de dólares para el Departamento de Estado y 2.900 millones para "la comunidad de inteligencia y actividades clasificadas en la lucha contra el terrorismo", según un comunicado de la Casa Blanca. La petición, que el Pentágono considera que cubrirá los gastos de la guerra al menos hasta el final de septiembre, se suma a otros 50.000 millones de dólares que el Congreso había aprobado en diciembre para Iraq y Afganistán.