ESCASA COMPETENCIA

La UE denunciará a los países con monopolización telefónica local

Por Ana Romero Vicente2 min

Economía29-11-2001

Todos los Estados de la UE acordaron, a principios de este año, establecer la apertura de líneas locales. Sin embargo, han sido muchos los países que lo han incumplido, y han frenado así un proceso de liberalización que tenía por principal objetivo acabar con el monopolio telefónico en muchos países, es decir, garantizar la libre competencia de este sector en Europa.

La liberalización de estas líneas o bucles locales consiste en tratar de obligar a los ex monopolios telefónicos a ceder el último tramo de su red a los competidores, para que así éstos puedan dar un servicio directo a sus clientes. Por ello, la UE estableció una serie de criterios que debían respetarse: lo primero, dar a conocer los precios de las líneas locales liberalizadas; después, abrir las líneas del operador que tuviera el monopolio (por ejemplo, Telefónica en España); por último, llevar a cabo el plan, es decir, permitir el acceso compartido a éstas. El fracaso de este proyecto cierra las puertas a la telefonía de la competencia metropolitana, lo que incide directamente sobre el consumidor/usuario, que no podrá contratar los servicios de telefonía local con otros operadores diferentes a los ya establecidos en su mercado. Por su parte, la Comisión Europea ha declarado que un total de 11 países de la Comunidad han infringido estos acuerdos, y que tan sólo en Bélgica, Dinamarca, Suecia y Finlandia, se ha hecho efectivo el acceso compartido de líneas con sus respectivos operadores de telefonía tradicionales. En el caso de España, éste también ha sido uno de los países avisados por el Ejecutivo europeo. Las redes locales en nuestro país siguen perteneciendo a Telefónica, y aunque publicó sus ofertas a los competidores, éstos nuevos operadores las consideran fuera de mercado competitivo por las tarifas que exigen. Por tanto, la realidad es que en España sólo existen siete líneas abiertas a la competencia local, y además, ni siquiera están compartidas. Esta situación de escaso nivel de competencia es preocupante, ya que es aprovechada por las empresas que tienen el monopolio. Así, la Comisión del Mercado de Telecomunicaciones (CMT), acaba de abrir dos expedientes contra Telefónica por efectuar prácticas anticompetitivas en la venta de la líneas ADSL, de acceso rápido a internet. La Comisión Europea ha afirmado que si los países no cumplen con lo establecido, no dudará en imponer fuertes sanciones. Incluso podría denunciarlo ante el Tribunal de Justicia de la Unión Europea durante los próximos días del mes de diciembre.