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ORIENTE PRÓXIMO

Palestina avanza hacia la unidad ante el escepticismo de Israel

Por Miguel MartorellTiempo de lectura2 min
Internacional18-02-2007

La reunión de alto nivel entre Hamas y Al Fatah ha dado resultados y Palestina, tras meses de virulenta crisis, empieza a dar tímidos pasos hacia la estabilidad. Ambas facciones se han comprometido a cumplir al pie de la letra los acuerdos de La Meca y ya se han iniciado los primeros movimientos dirigidos a formar el tan esperado gobierno de unidad nacional. Sin embargo, Israel y Estados Unidos esperan con cautela, y no sin cierto escepticismo, el desarrollo de los acontecimientos.

El primer ministro palestino, Ismael Haniya, presentaba el pasado jueves su dimisión ante el presidente de la Autoridad Nacional Palestina (ANP), Mahmud Abbas Abu Mazen. Era el primer paso de Hamas para llegar a la formación de un gobierno de unidad nacional que saque a Palestina de la crisis económica, social y política que vive. Haniya entregó su carta de dimisión a Abbas en un ambiente distendido, en el que incluso pudo verse un intercambio de risas y gestos afables entre ambos dirigentes. Nada que ver con el abismo que ha separado a Hamas y Al Fatah en los últimos meses y del que pueden dar testimonio los cerca de 90 muertos y más de 300 heridos que han causado sus enfrentamientos. La cocina de ese consenso para el gobierno de unidad nacional fueron los acuerdos de La Meca, que se fraguaron en dos días de intensas negociaciones entre Abbas y el líder de Hamas, Jaled Meshal, con el rey saudí Abdalá como mediador. En anteriores encuentros, tanto en Egipto como en Siria, el diálogo entre ambos líderes había terminado en fracaso. Los acuerdos de La Meca prevén la formación de un nuevo Ejecutivo palestino, encabezado por el propio Haniya. Será él el encargado de decidir con qué personas hará funcionar el gobierno de unidad, con la única condición de incluir a miembros de Al Fatah en el reparto de ministerios. Según las primeras informaciones, Hamas dirigirá siete carteras y los hombres de Abbas las otras seis. Una vez elaborado el Gabinete, que se prevé tener acabado en dos semanas, el presidente de la ANP debe dar el visto bueno y luego dejar la composición en manos de un comité ejecutivo que debe dar la luz verde definitiva. El acuerdo no sólo pretende poner fin a la guerra abierta entre las facciones, especialmente cruenta desde diciembre, sino también superar el boicot de la ayuda financiera internacional que provocó la victoria en las urnas de Hamas, incluida en la lista de organizaciones terroristas de la UE y EE.UU. Pese al optimismo que reina en estos días en la esfera política palestina, lo cierto es que Israel y EE.UU. han acogido con escepticismo los acuerdos de La Meca. La primera reacción del primer ministro israelí, Ehud Olmert, ha sido de auténtica contención: no habrá colaboración con Palestina mientras Hamas no cumpla las condiciones del Cuarteto de Madrid, entre ellas, y principalmente, el reconocimiento del Estado de Israel. La decisión, según aclaró el propio Olmert, ha sido aprobada y adoptada en “completa coordinación” con Estados Unidos, que ha enviado a su secretaria de Estado, Condoleezza Rice, a la región para analizar la situación.