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ENERGÉTICAS

Bruselas tiene menos de un mes para analizar la OPA de E.On sobre Endesa

Por Paula Escalada MedranoTiempo de lectura2 min
Economía19-03-2006

Bajo la bandera de la imparcialidad, Europa y no España estudiará la propuesta de E.On. La alemana guarda así un poco sus espaldas, al mismo tiempo que juega a dos bandas y no pierde sus contactos con la Comisión Nacional de la Energía (CNE) de España.

España quería decidir exclusivamente sobre la Oferta Pública de Adquisiciones (OPA) que E.On lanzó hace unos meses sobre Endesa, también conocida como contraopa de la que Gas Natural había lanzado en septiembre sobre la misma empresa. Muestra de ello fue el repentino decreto que aprobó el Gobierno para ampliar las facultades de la CNE y alejar a la Comisión Europea (CE). Pero este repentino decreto no gustó mucho en Europa y la CE pidió explicaciones y dio a España un plazo para darlas. El plazo llegó a su fin la pasada semana y España pidió más tiempo, pero le fue denegado. Primer revés para el Ejecutivo español, pero no único, ya que Bruselas ha defendido su estatus y su derecho a intervenir en el caso. Así, el portavoz europeo de Competencia, Jonathan Todd, comunicó que el Ejecutivo comunitario examinará el caso, aunque “únicamente sobre la base de sus efectos sobre la competencia”. En su defensa, el portavoz apuntó que la CE tiene “competencia exclusiva” para analizar las fusiones de dimensión comunitaria, y por tanto el Gobierno español “no tiene derecho” a alegar motivos de competencia si quiere bloquear la OPA de E.On. Dicho y hecho. Europa decidió revisar la OPA y ya lo está haciendo, ya que E.On ya ha notificado a la CE su oferta sobre Endesa y le ha entregado al órgano los documentos que explican los detalles de la operación. Así, la CE tiene ahora hasta el 25 de abril para decidir si la OPA tiene o no algún impacto negativo sobre la competencia. En el caso de que la CE encontrara que la operación podría tener algún efecto negativo sobre la competencia, abriría una investigación en profundidad. En caso contrario, aprobaría la OPA, que pasaría a ser juzgada por España. Precisamente por eso, porque el paso por España es inevitable, E.On no quiere descuidar sus contactos con el país y mantiene relaciones con la CNE, con el objetivo de preparar toda la documentación de la OPA. Esto es, una vez Europa apruebe la operación, E.On tendrá que pasar el difícil listón de la CNE. Aún no hay un plazo fijo para ello.