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ANÁLISIS DE SOCIEDAD

Suposiciones sobre ETA

Fotografía

Por Almudena Hernández Tiempo de lectura2 min
Sociedad28-03-2017

Se supone que ETA entregará las armas el 8 de abril y que se pasará página, a pesar de toda la cizaña sembrada en la sociedad y los cientos de vidas que segaron los terroristas ¿También entregará las pistolas que podrían esclarecer más de 300 asesinatos que quedan sin resolver?

Se supone que tras el alto el fuego anunciado en la era Zapatero algo cambió para siempre en la sociedad, especialmente en la vasca, donde los terroristas y sus palmeros pavonean ante las víctimas y sus familias y siguen amedrentando a quienes, como la Guardia Civil, siempre defendieron la libertad.

Se supone que en todo este proceso habrá que mirar hacia otro lado, pese al dolor de muchos, y que habrá que aceptar pulpo como animal de compañía y hacer como si muchos no tuvieran las manos manchadas de sangre.

Pero también se supone que la justicia es la mejor manera de curar las heridas y que para el perdón (que no el olvido) siempre contribuye el arrepentimiento; que muchas personas tienen que tomar pastillas para dormir o que para hablar con sus seres queridos tienen que ir al cementerio.

Se supone que, a partir del 8 de abril, ETA pasará a la historia, esa ya que nadie se aprende porque está a un clic en la Wikipedia, y que a muchos les traerá al fresco tanto dolor provocado por los del tiro en la nuca, los coches bomba, los secuestros, las extorsiones y la violencia callejera de no hace tantos años.

Se supone que, a partir del 8 de abril, ya nadie recordará el sudor frío de mirar los bajos del coche cada mañana, ni las negativas a dejarse acompañar por un amenazado de muerte, ni los sobres y paquetes sospechosos que llegaban día sí y día también en la saca de Correos a los marcados en la diana de ETA.

Se supone que el 8 de abril, como ha anunciado hace unos días, ETA entregará las armas y que no volverá a matar, pero ni ese ni otro día podrá borrar las cientos de esquelas que mandó a la imprenta y que la Wikipedia recordará mientras la vida sigue. También para los asesinos.

Fotografía de Almudena Hernández