ANÁLISIS DE CULTURA
El timo
Por Marta G. Bruno
2 min
Cultura23-09-2015
Trueba escandalizó hace unos días a media España al promulgar micrófono abierto que no se sentía ni cinco minutos español. Analicemos la circunstancias entre el ser y el sentir. Entre la sensación y la realidad, que casi siempre es cruda. Y los hechos son del verbo “ser”, es decir, los siguientes: es usted español, aunque no lo sienta. Y, por lo tanto, debe sufrirlo en sus carnes. Renegar de las raíces es tan cobarde como la guerra entre franceses y españoles que usted tanto ensalzó. Por el lado opuesto sería tan heroico como la batalla en sí. Y como impera el relativismo, digamos que los hechos imprimen sin más dilación que usted es español.
Pero señor Trueba, borraremos de la memoria sus palabras porque la libertad de expresión es tan infinita como ancha es Castilla y quedémonos con lo fulguroso de su filmografía. Porque el cine español tiene sus joyitas. Sí, señor director, español dicen los hechos: La niña de tus ojos o Chico y Rita, premiados como cine español. Hagamos, otra vez, una división entre ideologías y filmografías porque entonces no todo el mundo iría al cine.
Es lo que tiene España, una corrala perpetua que se revoluciona como un adolescente en campaña electoral. Y entonces vivimos esperpentos como políticos hablando en indio, bailes de invitado de boda a altas horas de la madrugada, y lo que te rondaré morena que mientras sea esto y no facturas falsas o sobres con dinero negro, bailemos todos juntos al amanecer pipa en mano.
Que mientras nosotros no seamos una de las 120.000 personas que Europa se quiere repartir como un huérfano que no tiene a dónde ir entonces podremos seguir viviendo en esta pompa, que no fúnebre. Lo será cuando la burbuja que ya no es inmobiliaria sino una tontuna dialéctica vuelva a explotar. Veremos entonces que hemos vuelto a escoger al político que nos vuelve a dejar con los bolsillos vacíos. O elegimos a otro que tampoco nos saca de pobre. Un timo, señores, un timo. Eso sí, español como el buen cine, que lo hay, siempre lo ha habido, pero nosotros no hemos sabido reconocerlo. O eso o los que se dedican a ello no han sabido centrarse en lo suyo.
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Marta G. Bruno
Directora de Cultura de LaSemana.es
Licenciada en Periodismo
Estudio Ciencias Políticas
Trabajo en 13TV
Antes en Intereconomía TV, La Razón y Europa Press