A veces lo que creemos conocer no es más que una sensación. Las personas ocultan sentimientos, ocultan sensaciones y, sobre todo, ocultan el pasado. Tammy Cohen llega este septiembre con una novela de esas que no dejan levantar la vista del papel, hablamos de Maldad.
A través de los testimonios de siete personajes (Anne, Paula, Sarah, Ewan, Amira, Charlie y Chloe) se va desarrollando esta historia. Seis de ellos son compañeros de trabajo, todos conviven diariamente en la misma oficina y todos saben, o creen saber, cada detalle acerca del resto. Saben cómo les gusta el café, que a Sarah no le dejan dormir sus hijos, que Amira tiene una hipoteca es demasiado alta para hacerle frente y que la joven Chloe vive un amor platónico hacia Ewan. Hay días, incluso, que se despejan juntos mientras toman algo después del trabajo.
Todo parece cambiar cuando aparece Rachel, una nueva jefa que se toma enserio su trabajo y que consigue lo que se propone, es en ese momento cuando las reglas del juego cambian y el secreto de uno de ellos puede salir a la luz. Pero, ¿quién? Y sobre todo, ¿qué?
Maldad es adictiva y consigue hacerte reflexionar sobre los límites del ser humano, sobre la capacidad de nuestra menta a borrar episodios de nuestra vida. Lo mejor es que la intriga se mantiene hasta casi el final, lo que permite al lector ir haciendo sus conjeturas y sospechar de unos y otros. Una novela trabajada de una autora con bagaje pero desconocida en España.
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