La librería de los finales felices es una obra que poco a poco encandila y es que presenta el poder que puede llegar a tener algo tan aparentemente insignificante como es un libro. Un canto al poder de la amistad, el amor por los libros y la necesidad de encontrar nuestro lugar en el mundo.
Su escritora, Katarina Bivald, trabajó como librera durante varios años. Ahora, presenta su debut literario La librería de los finales felices que será publicado por quince editoriales extranjeras.
La librería de los finales felices narra la historia de Sara y Amy, dos mujeres que pertenecen a generaciones diferentes y, sin conocerse personalmente, por circunstancias de la vida, acaban intercambiando cartas durante dos años, hablando sobre su gran amor: los libros. Tal es la conexión que sienten que Sara decide emprender un viaje para conocer a su anciana amiga. Sin embargo, cando llega al pequeño pueblo de Lowa descubre que ella ha fallecido.
Su amiga ya no está, pero ha dejado en su casa una librería con miles de libros que Sara aprovechará para embarcarse en la locura de montar una librería con estos ejemplares. Sola, en ese pequeño rincón del mundo, comienza a buscar un libro para cada uno de los moradores de la localidad, descubriendo así una obra que cambiará la vida de todos ellos.
Sara se encuentra sola en una pequeña población aislada del mundo. Por suerte, gracias a las cartas de Amy, conoce bien a los excéntricos habitantes del pueblo, y éstos cuidan de esta turista desconcertada. Sara decide quedarse, y por primera vez en su vida hace amigos de verdad. Ella cambiará la vida de un pueblo triste y abandonado y a sus habitantes, que pronto empiezan a ver a Sara como algo suyo, ya que los motiva, los hace moverse y despertar.
Una obra de fácil lectura que, desde un punto de vista optimista, invita a descubrir como unas simples líneas pueden cambiar toda una vida.
Imprimir
Enviar
Comentar