Balaídos sueña con Europa

Por Alejandro Campo2 min

El Celta de Vigo se ha impuesto al Alavés en un partido tremendamente disputado que no se decantó hasta el minuto 89 gracias al gol de Radoja. La victoria gallega se apoyó en la expulsión de Feddal que hizo que su equipo jugase con uno menos a lo largo de todo el segundo tiempo. Los gallegos, con esta victoria, siguen acercándose a su objetivo de pasear la elástica celeste por Europa la próxima campaña.

Tras el pitido inicial pudimos apreciar que ambos conjuntos mostraban una cara conservadora, con demasiadas reservas. La primera ocasión llegó gracias a una buena combinación entre Wass y el delantero Aspas que acabó estrellando el esférico en el portero rival. A partir de este momento el Celta se animó ligeramente y empezó a monopolizar el juego ofensivo de la primera parte. El conjunto de Pellegrino solamente lograba llevar algo de peligro en jugadas a balón parado, pero ni aun así pusieron en demasiados apuros al guardameta celtista Rubén Blanco.

A los pocos segundos de reanudarse el encuentro tras el descanso, una fea falta del central vitoriano provocó que le sacasen la segunda amarilla y por lo tanto, su expulsión. Con Feddal expulsado Pellegrino se vio obligado a sacrificar a Ibai Gómez para dar entrada a Alexis y así poder reconstruir la línea defensiva. Con el rival en inferioridad el Celta se erigió como amo y señor del partido, sin embargo, el Alavés que solo se limitó a defenderse, no se deshizo en ningún momento. A pesar del dominio de los locales, el joven Theo estuvo a punto de dar un disgusto a los aficionados de Balaídos cuando se plantó dentro del área celtista, pero finalmente Rubén evitó la sorpresa. Cuando ya parecía que el marcador no se iba a mover apareció Radoja que tras recibir un balón de Hugo Mallo, acertó al recortar a su par para finalmente mandar el esférico al fondo de la red y dar tres puntos a su equipo que le permite seguir soñado con Europa.