El Xerez vuelve a segunda

Por Carlos Gil Ballesteros2 min

El Xerez se despidió con mucho orgullo de su primera aventura por la máxima categoría del fútbol español. Con el empate conseguido ante el Club Atlético Osasuna los andaluces quedaban sentenciados como colistas de la temporada. Aún habiendo conseguido la victoria, hubieran descendido ya que los resultados de los rivales no acompañaron para su suerte. Por su parte, el Osasuna cerró una gran temporada con un empate, y demostrando gran profesionalidad ya que jugaron un buen partido pese a no jugarse nada. La pelota echó a rodar sobre el césped del viejo Sadar. El conjunto local tomó el control de la pelota en los primeros compases del encuentro. El Xerez estaba nervioso y no conseguía dar más de dos pases seguidos. Se veía cerca del infierno de la segunda división. El partido no tenía rumbo y ninguno de los dos equipos controlaba el balón ni se dirigía al ataque. La primera ocasión de peligro no llegó hasta pasada media hora de encuentro. Fabián Orellana cruzó en exceso un magnífico pase de Carlos Calvo y el esférico se marchó desviado. Con esa ocasión el Xerez se fue arriba y se creyó capaz de permanecer en primera. Gozó de un par de ocasiones más antes del descanso pero ninguna de ellas acabó dentro de la portería, y con el empate sin goles se llegó al descanso en el Reino de Navarra. En el comienzo de la segunda parte, los rojillos salieron mucho más enchufados en ataque. Y en los primeros instantes de esta segunda mitad consiguieron adelantarse en el marcador. Eduardo Fernandes, Dady, marcó el primer gol de su equipo con un potente disparo que superó al guardameta, Renán Brito. Con este gol, el Xerez en vez de venirse abajo y rendirse, decidió atacar para por lo menos no despedirse de esta aventura con una derrota. Y poco duró la ventaja rojilla en el marcador, ya que momentos después el Xerez igualó la contienda. Antonio Ramírez, Antoñito, disparó desde fuera del área y el esférico botó delante del portero para más tarde colarse dentro de la portería. Aunque los visitantes sabían que estaban casi sentenciados no dejaron de luchar hasta el final del partido y demostraron un gran amor por el equipo y por el fútbol al igual que su afición. Por su parte los navarros, sin jugarse nada realizaron un gran partido y tuvieron ocasiones suficientes para haber marcado más goles y haberse llevado la victoria. El Xerez dice adiós a la Primera división tras un año, y el Osasuna permanecerá en la máxima categoría otra temporada más.